L D (Europa Press) El secretario general de Unión Sindical Obrera (USO), José Luis Fernández Santillana, dijo en rueda de prensa que el objetivo del acto es despertar en la ciudadanía la idea de que "no vale cualquier cosa en Educación". Santillana no descartó una nueva protesta en la calle "si la sociedad lo exige". Las diez asociaciones educativas que organizaron la movilización del 12N pretenden centrar su acción no sólo en decir "no" al texto gubernamental, sino también en platear propuestas para solucionar cuestiones como el fracaso escolar y fomentar la convivencia pacífica en los centros escolares.
Por ello, presentarán a los distintos grupos parlamentarios del Senado más de 80 enmiendas a la futura LOE que consideran "irrenunciables" para lograr que la ley no rebaje la calidad del sistema educativo, atienda las necesidades del profesorado y no suponga un retroceso para los derechos y libertades en materia de Educación. Entre sus propuestas, estas organizaciones rechazan que un concejal o representante del Ayuntamiento forme parte del consejo escolar del centro concertado porque, según criticó la presidenta de la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), Isabel Bazo, supone la "estatalización" de la empresa privada.
También lamentan que no se iguale la enseñanza de Religión al resto de asignaturas y, por el contrario, se "imponga" un "adoctrinamiento" con la materia de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, para la que la Confederación Nacional Católica de Asociaciones de Padres de Alumnos (CONCAPA) ha planteado "objeción de conciencia". Y denuncian un "temor" a la evaluación, la autorización de los novillos y una "gran desunión" del sistema.
Además, la plataforma contra la LOE celebrará más de 50 actos informativos por toda España para explicar por qué, a pesar de las modificaciones del Congreso, la reforma no resolverá –a su juicio– los problemas fundamentales del sistema educativo español, ya que las ven las modificaciones como un "maquillaje" del texto original para transmitir la "falsa idea" de que se ha alcanzado un consenso.