L D (EFE) La primera nave de exploración debía partir el 30 de mayo para descender en el cráter Gusev, a 15 grados al sur del ecuador marciano. El lanzamiento de la segunda estaba previsto para el 25 de junio y debía "aterrizar" sobre el Planu Meridiani, una zona donde hay extensos depósitos de óxido de hierro. Uno de los objetivos principales de las naves exploradoras será verificar la existencia de agua en algún punto del planeta rojo.
"El descenso en Marte es muy difícil, mucho más en algunas zonas que en otras", ha manifestado Mark Weiler, administrador de ciencias espaciales de la NASA en Washington. "Al elegir estos sitios de descenso se han ponderado las consideraciones de seguridad con el valor científico que pudieran tener", ha añadido. Fuentes de la agencia espacial han dicho que debido al problema el lanzamiento del primer vehículo de exploración no se realizará antes del seis de junio, y se espera que el segundo parta entre el 25 de junio y el 15 de julio.
El descubrimiento de un posible cortocircuito en los sistemas de los vehículos impulsó a la NASA a realizar una revisión independiente de los procesos de diseño de las naves para que no haya más problemas. La NASA hizo más estrictas la supervisión de los diseños y preparación de los vehículos de exploración del planeta Marte, después de perder dos de esas naves en 1999.
Una de ellas, el Climate Orbiter, se desintegró en la atmósfera del planeta debido a un problema de conversión de medidas entre el sistema decimal y el sistema anglosajón que se utiliza en EEUU. La otra, el Polar Lander, se estrelló contra la superficie del planeta rojo debido a que sus motores fueron apagados prematuramente.
"El descenso en Marte es muy difícil, mucho más en algunas zonas que en otras", ha manifestado Mark Weiler, administrador de ciencias espaciales de la NASA en Washington. "Al elegir estos sitios de descenso se han ponderado las consideraciones de seguridad con el valor científico que pudieran tener", ha añadido. Fuentes de la agencia espacial han dicho que debido al problema el lanzamiento del primer vehículo de exploración no se realizará antes del seis de junio, y se espera que el segundo parta entre el 25 de junio y el 15 de julio.
El descubrimiento de un posible cortocircuito en los sistemas de los vehículos impulsó a la NASA a realizar una revisión independiente de los procesos de diseño de las naves para que no haya más problemas. La NASA hizo más estrictas la supervisión de los diseños y preparación de los vehículos de exploración del planeta Marte, después de perder dos de esas naves en 1999.
Una de ellas, el Climate Orbiter, se desintegró en la atmósfera del planeta debido a un problema de conversión de medidas entre el sistema decimal y el sistema anglosajón que se utiliza en EEUU. La otra, el Polar Lander, se estrelló contra la superficie del planeta rojo debido a que sus motores fueron apagados prematuramente.