L D (Europa Press) La ministra de Educación y Ciencia, María Jesús San Segundo, ha dicho que respeta la manifestación aunque no comparta "en absoluto" las inquietudes que se manifiestan como lemas para la misma porque, según ella, no están basadas en la realidad del texto. La titular Educación defendió que respeta los derechos tanto de los padres que quieren enseñanza de Religión para sus familias como de los que renuncian a él.
Por eso, insistió, en que este proyecto de ley está basado en la igualdad, sin olvidar la importancia del esfuerzo personal, dijo, y cuando se tiene "todo esto" la derecha española se basa en "la bronca y la protesta". Confirmó que la LOE atiende de una manera "directa" a la diversidad de alumnos y establece mecanismos necesarios para la solución de cada uno de ellos, buscando el éxito escolar "de todos los alumnos. De esta manera, recalcó, se puede seguir instalados "en la bronca y el descrédito" y hacer "ruido" como "van a hacer", dijo ante la manifestación de este sábado, o se puede optar por debatir y llegar a acuerdos, como está haciendo el Gobierno, concluyó.
Por ello, añadió, el texto es "perfectamente constitucional y se ajusta plenamente a la legalidad" y así lo ha confirmado el Consejo de Estado en la enseñanza de la Religión y el derecho a las familias a elegir centro, respetando los derechos "de todos" y apostando por un futuro mejor para "todos y cada uno de los jóvenes". La titular de Educación defendió la implicación de todas las posturas en la reforma educativa, que va "mucho más" allá de una Ley concreta. "Por eso hay que centrarse en los recursos, que son necesarios si se quieren hacer las cosas bien y para ello se requieren muchos esfuerzos, de ahí los 6.000 millones de euros de la memoria económica del Gobierno, dedicados a programas de apoyo y refuerzo o a medidas para el profesorado, entre otros", añadió.
La ministra recomienda que se mire a la Educación Infantil
Así, la ministra dijo que si un lector se quiere acercar a la Ley, recomendó que se busque y mire a la Educación Infantil, que es "importante" y en la que se apuesta por un proyecto educativo con personal cualificado y que potencie desde el principio el desarrollo y estimule a los niños "todas sus capacidades", ayudando de este modo a prevenir desigualdades, lo que "la diferencia" de la Ley de Calidad.
También hay que mirar si la ley construye "un edificio de aprendizaje", indicó San Segundo, quien afirmó que se apuesta por el éxito escolar ya que nadie está "por el fracaso" en la escuela.
Así, la Ley define las competencias básicas, como comprensión lectora, expresión oral y escrita o las matemáticas, pero además, "queremos Humanidades y Ciencias" para lo que es necesaria una formación equilibrada y también los Idiomas, que se adelantan a Educación Infantil y para los que ya hay dotación presupuestaria para 2006, indicó.
Sobre la Educación para la ciudadanía, recordó que está recomendada por instituciones internacionales como la Unión Europea o la UNESCO, porque es "sobre todo, Educación para la convivencia" y hay que encontrar un espacio específico para que se trabaje en los valores de igualdad y respeto a los demás.
En materia de becas, resaltó la importancia de que en año y medio se hayan producido tres subidas del presupuesto para esta materia, y hayan establecido diversas medidas extraordinarias. El objetivo número uno, recalcó, son los estudiantes de menor renta, cuyas ayudas "habían perdido valor adquisitivo" tanto en transporte como en libros o residencias.
Almunia: "Se puede hacer ruido, como van a hacer, o debatir como hace el Gobierno"
Por su parte, la secretaria de Educación del PSOE y consejera de Educación de Aragón, Eva Almunia, destacó el hecho de que el PP y "todos sus gobiernos" hayan considerado innecesaria la inversión en Educación, porque la única pócima "mágica" que encontraron, dijo, pasaba por la formación religiosa.
Indicó que la justificación de la Conferencia Episcopal de que la mayor parte de alumnos quiere formación religiosa, no se puede aplicar a la Educación Secundaria, donde más de la mitad de alumnos olvidan esta preferencia por la asignatura de Religión, confirmó.