La línea del AVE, suspendida hasta primera hora de la tarde

El tráfico ferroviario fue interrumpido a las 21.00 horas de este lunes una vez que la empresa Adif, Administradora de las Líneas Ferroviarias, detectara balsas de agua en las vías de La Sagra y Yeles (Toledo).

La línea Madrid-Cáceres también quedó suspendida a las 0.09 horas de este martes a causa de las lluvias torrenciales caídas en las localidades de Villaluenga y Yuncler, que anegaron algunas vías.

Adif prevé el restablecimiento de la circulación para primera hora de la tarde de hoy. Según la empresa, los equipos de mantenimiento y reparación de vía del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias han trabajado durante toda la noche y continúan haciéndolo para recuperar a la mayor brevedad posible una de las dos vías afectada por las inundaciones en la provincia de Toledo, a la altura de las localidades de Yeles y La Sagra.

Cerca de 8.000 pasajeros afectados

Según las previsiones de Renfe, hasta las 14.00 horas podrían verse afectados por el corte 13 trenes AVE con origen Madrid (2.273 viajeros), 9 con destino Madrid (1.394 viajeros) y dos transversales Sevilla/Málaga-Barcelona.

Además de tres trenes de Larga Distancia (Madrid-Algeciras-Madrid y Granada-Madrid), con 300 pasajeros en total, y 25 trenes de Media Distancia (11 Madrid-Puertollano-Madrid y 14 Madrid-Toledo-Madrid), con 2.025 viajeros. Además, ayer se suspendió la circulación de 16 trenes, en los que viajaban 1.890 personas.

Inundaciones en Toledo, Ciudad Real y Madrid

Las fuertes tormentas caídas sobre Madrid, Toledo, Guadalajara y Ciudad Real han provocado inundaciones de garajes y viviendas y caídas de árboles. En Madrid, las tormentas causaron inundaciones en calles, casas bajas, chalés y garajes y provocaron varios accidentes de tráfico leves en carreteras de varias localidades del sur de la Comunidad.

Las zonas más afectadas por las inundaciones fueron Parla, Rivas Vaciamadrid, Humanes y Colmenar de Oreja, donde el agua caída alcanzó el metro de altura y anegó casas de una planta.

Los bomberos de la Comunidad de Madrid tuvieron que rescatar a varios conductores que quedaron atrapados en sus vehículos debido a riadas, e intervinieron varias veces en la carretera M-305 y en vías de polígonos industriales que quedaron cerradas por la tromba de agua.

Además, la granizada que siguió a la tormenta produjo daños en techos de vehículos y derribó ramas de árboles, y se registraron también pequeños incendios originados por los rayos, que fueron extinguidos por los bomberos.

En la ciudad de Toledo, por la tarde, cayó durante casi una hora una fuerte tromba de agua y granizo acompañada de fuerte viento, lo que provocó caída de árboles e inundaciones en bajos, aunque no se ha informado de daños personales. Las tormentas afectaron también a otros puntos de Castilla-La Mancha, como Azuqueca de Henares, en la provincia de Guadalajara, donde se han producido inundaciones en garajes y balsas de agua en la vía pública.