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La hipótesis del asesinato vuelve a tomar fuerza en el caso de la pareja muerta de Tarragona

La autopsia y la investigación que lleva a cabo la Guardia Civil han revelado que únicamente Albert S. apretó el gatillo de la escopeta que acabó el lunes con su vida y con la de su novia en la localidad tarraconense de Mas de Barberans. También ha indicado que fue ella quien murió primero, por lo que todo apunta a que se trataría de un caso de violencia de género y no de un suicidio pactado por ambos.

La autopsia y la investigación que lleva a cabo la Guardia Civil han revelado que únicamente Albert S. apretó el gatillo de la escopeta que acabó el lunes con su vida y con la de su novia en la localidad tarraconense de Mas de Barberans. También ha indicado que fue ella quien murió primero, por lo que todo apunta a que se trataría de un caso de violencia de género y no de un suicidio pactado por ambos.
L D (EFE) Fuentes próximas a la investigación han apuntado que además la Guardia Civil cuenta con testigos que ratifican las continuas disputas que mantenían los dos jóvenes que, pese a su corta edad, 18 años él y 15 ella, habían iniciado su relación hacía más de dos años, cuando ambos estudiaban en el instituto Planes de la vecina localidad de Santa Bárbara. Algunos de estos testigos han declarado que el joven era muy celoso y que ello le conducía a reprender a menudo a novia.
 
Al parecer, la autopsia ha confirmado que la muerte de Melodi LL. se produjo minutos antes que la del chico y que éste se quitó la vida con el segundo disparo de una escopeta de caza de cartuchos de dos cañones. Sin embargo, los médicos forenses no han encontrado signos de una pelea anterior al disparo que mató a la joven y que le impactó en el rostro.
 
Una de las hipótesis con la que trabajan los investigadores es que tras la discusión, los dos jóvenes novios se encerraron en el garaje de la casa de los padres de él para acabar la conversación y, en un arrebato, el chico apuntó en la boca a su novia y ésta no tuvo tiempo de reaccionar al producirse el disparo. No ha trascendido si la escopeta, que al parecer estaba en el garaje y que es propiedad del padre del chico, estaba ya cargada con los dos cartuchos o fue el joven quien la armó con intención de disparar. La posición en que fue encontrada el arma homicida ya apuntaba la hipótesis del homicidio y no del suicidio, según las mismas fuentes, y la trayectoria del disparo que mató a Melodi también indicaba que no había podido ser efectuado por ella misma.
 
Fue el alcalde de Mas de Barberans, Francesc Subirats, el que explicó a los periodistas al conocerse el suceso que podía tratarse de un suicidio pactado, extremo que los investigadores siempre pusieron en duda. El funeral por las dos víctimas se oficiará este jueves, a las 17:00 horas, aunque el alcalde ha pedido que los periodistas se abstengan de acudir a la iglesia "por expreso deseo de las familias y con la finalidad de salvaguardar el íntimo dolor y sufrimiento de familiares". 
 

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