L D (EFE) La consejera ha asegurado que pedirá al nuevo gobierno central una moratoria de la Ley de Calidad para "dar estabilidad al sistema educativo y llegar al máximo consenso con el resto de comunidades autónomas" sobre este asunto.
La Ley de Calidad "no nos gusta ni nos ha gustado nunca", ha admitido la consejera en un comunicado, en el que también ha pedido que se acabe "con ese ritmo de reformas y contrarreformas cada vez que cambian las mayorías que conforman el Gobierno del Estado". Por este motivo, Cid, que ha garantizado a la comunidad educativa que sólo se harán en Cataluña los cambios "a los que podamos llegar a tiempo", ha exigido una normativa "que dé estabilidad al sistema educativo y que no se modifique en función de la fuerza que gobierne en cada momento".
"Todo nos hace pensar que no seremos los únicos que harán llegar al gobierno esta petición", ha apuntado la consejera, que espera "una actitud mucho más dialogante" del Ministerio de Educación para "abrir puentes y un marco de diálogo de manera inmediata".
También el sindicato de Enseñanza CCOO de Cataluña ha reclamado al ejecutivo catalán que pida al nuevo gobierno español que se configurará tras las elecciones de ayer que interrumpa el desarrollo de la Ley de Calidad y de la Ley de Universidades. UGT se ha sumado igualmente a la petición de una moratoria que permita a la comunidad educativa consensuar "qué aspectos de la Ley de Calidad es necesario modificar y de qué manera". USTEC, sindicato mayoritario en la enseñanza en Cataluña, ha coincidido en exigir la moratoria y ha recordado que la Ley de Calidad fue aprobada sólo con los votos del PP y "en contra del resto de las fuerzas políticas y de toda la comunidad educativa".
La Ley de Calidad "no nos gusta ni nos ha gustado nunca", ha admitido la consejera en un comunicado, en el que también ha pedido que se acabe "con ese ritmo de reformas y contrarreformas cada vez que cambian las mayorías que conforman el Gobierno del Estado". Por este motivo, Cid, que ha garantizado a la comunidad educativa que sólo se harán en Cataluña los cambios "a los que podamos llegar a tiempo", ha exigido una normativa "que dé estabilidad al sistema educativo y que no se modifique en función de la fuerza que gobierne en cada momento".
"Todo nos hace pensar que no seremos los únicos que harán llegar al gobierno esta petición", ha apuntado la consejera, que espera "una actitud mucho más dialogante" del Ministerio de Educación para "abrir puentes y un marco de diálogo de manera inmediata".
También el sindicato de Enseñanza CCOO de Cataluña ha reclamado al ejecutivo catalán que pida al nuevo gobierno español que se configurará tras las elecciones de ayer que interrumpa el desarrollo de la Ley de Calidad y de la Ley de Universidades. UGT se ha sumado igualmente a la petición de una moratoria que permita a la comunidad educativa consensuar "qué aspectos de la Ley de Calidad es necesario modificar y de qué manera". USTEC, sindicato mayoritario en la enseñanza en Cataluña, ha coincidido en exigir la moratoria y ha recordado que la Ley de Calidad fue aprobada sólo con los votos del PP y "en contra del resto de las fuerzas políticas y de toda la comunidad educativa".