L D (Agencias) La Fiscalía de Barcelona ha decidido recurrir la excarcelación de cuatro violadores que habían cumplido tan sólo cinco mes de los doce años de cárcel a los que fueron condenados. El Mundo recoge declaraciones de funcionarios de prisiones que achacan esta decisión a "las influencias ejercidas por gente muy importante", e informa de que uno de los cuatro fue visitado en prisión por una famosa actriz y una presentadora de televisión.
En un comunicado, la Fiscalía puntualizó que ayer lunes recibió la notificación de la concesión del tercer grado a uno de los reclusos. Por ello, "tras el oportuno análisis de la situación, será recurrida durante el día de hoy". Respecto a los otros tres condenados, "a medida que se vayan recibiendo las notificaciones respecto de los otros condenados, serán igualmente recurridas", añade la Fiscalía.
Según el Ministerio Público, esta concesión a los violadores no es "ajustada a Derecho" por sus penas "tan dilatadas" y por unos hechos "muy graves", más todavía "tras solamente cinco meses de cumplimiento en prisión, periodo que resulta palmariamente insuficiente para tratamiento penitenciario alguno y para el cumplimiento de los fines constitucionales de la pena impuesta".
Durante el proceso judicial, la Fiscalía llegó a pedir 60 años de cárcel para cada uno de los procesados por la violación que cada uno perpetró y por la cooperación necesaria en las violaciones de los demás. No obstante, finalmente fueron condenados a 12 años de prisión y a indemnizar conjuntamente a Daniel M.V. con 12.000 euros por el daño moral y los perjuicios que le causaron.
La Consejería responde
Las juntas de tratamiento de dos de las cárceles donde cumplían condena –Brians y Brians 2– consideraron que los reclusos tenían que seguir en segundo grado. No obstante, una de ellas, la de Cuatro Caminos, propuso concederles el tercer grado restringido. Al haber disparidad de criterios, el 3 de abril la Dirección General de Recursos y Régimen Penitenciario decidió excarcelarles y dejarles en tercer grado.
Según Justicia, los cuatro reclusos siguen cumpliendo condena, aunque salen los fines de semana con condiciones de control y medios de tutela. Además, desarrollan "programas individualizados y especializados de tratamiento de conductas sexuales".
La decisión de clasificarles en tercer grado en régimen abierto restringido "responde a una valoración técnica" que "ha tenido en cuenta el tiempo transcurrido desde la comisión de los hechos con una conducta normalizada" y que desde que tuvo lugar la violación, el 21 de julio de 2001, permanecieron en libertad provisional, así como la ausencia de antecedentes penales, la "valoración ponderada del bajo riesgo de reincidencia", la disposición a seguir el tratamiento propuesto y la existencia de un entorno socio-familiar "estable".
Igualmente, la Consejería recordó que existe una petición de indulto que se tramita sin oposición de la víctima y la valoración positiva de la Fiscalía, que también ha tenido en cuenta las "circunstancias jurídicas existentes en este caso" y el "cumplimiento previo de los internos de las responsabilidades civiles a las que fueron condenados".
Famosas de visita en prisión
En su edición impresa de este martes, el diario El Mundo informa de que una portavoz del Departamento de Justicia catalán admitió ya el domingo la concesión del tercer grado a los cuatro condenados por violación, así como que uno de los cuatro acusados había recibido en la prisión de Briñas 2 la visita de la actriz Bibiana Fernández y de la presentadora de televisión Ana García Siñeriz.
El diario recoge también el testimonio de diversos funcionarios de prisiones, según los cuales, "la medida adoptada por la Generalidad sólo puede obedecer a las influencias ejercidas por gente muy importante porque nadie recuerda un caso ni siquiera parecido". Y es que, según recuerda el periódico, "no hay precedentes en la concesión de un tercer grado a internos que no han cumplido ni una décima parte de la condena y que, por si fuera poco, son culpables de delitos sexuales".
Versiones muy distintas
La historia se remonta a la madrugada del 21 de julio de 2001, en la discoteca Eibisi, cuando la gogó, Gemma A.B., de 29 años, se acercó a la víctima, Daniel M.V., y le dio un beso. Su novio por aquel entonces, el también acusado José María P.P., de 34 años, se acercó a ellos al ver la situación. "Lo que quieras hacer con ella lo tienes que hacer también conmigo", le dijo a Daniel.
Ante tal proposición, el joven decidió marcharse y dirigirse a otra zona de la discoteca. Entonces, Gemma se acercó de nuevo al lugar donde estaba Daniel y le invitó a tomar una copa en un vestíbulo cercano a los camerinos de la discoteca. El joven aceptó al ver que la chica venía sola y la pareja se dirigió al edificio que funciona como discoteca en invierno y que, por tanto, estaba cerrado al público cuando ocurrieron los hechos. El local, no obstante, podía ser utilizado por personas autorizadas, siendo éste el caso de los acusados.
Tan pronto como la víctima y la gogó traspasaron la puerta del edificio, los otros tres acusados se abalanzaron sobre Daniel y le colocaron unas esposas, llevándole hacia el cuarto de baño situado frente a los camerinos y haciendo caso omiso de los gritos y oposición del joven. Una vez allí, los procesados le bajaron los pantalones y los calzoncillos en contra de su voluntad y, tras sujetarle los pies para que no pudiera moverse, se turnaron para acariciarle y realizarle una felación entre todos.
Cuando el joven eyaculó, dos de los acusados, Germán C.M. y José Luis G.R., abandonaron el lugar. La gogó y su novio, el tercer drag queen, se dirigieron entonces a Daniel y le dijeron que ahora "le tocaba a él, en clara alusión a que le correspondía dar la satisfacción sexual que los otros querían", según la sentencia. Daniel se puso muy nervioso, pero consiguió convencer a los acusados para que le soltaran, aprovechando para salir del edificio.