L D (EFE) El departamento de Enseñanza ha informado de que la reunión se celebrará a instancias de la consejera Marta Cid, que había solicitado una entrevista urgente con la ministra en cuanto ésta tomara posesión del cargo.
Durante la reunión, Marta Cid reiterará a la ministra la necesidad de una moratoria del calendario de aplicación de la Ley Orgánica de Calidad de la Enseñanza (LOCE) "para poder abrir un período de reflexión y diálogo y llegar al máximo consenso posible, tanto social como político, en relación con el futuro de la LOCE y el marco normativo educativo que tenemos que configurar".
Según un comunicado de la Generalidad, la consejera también transmitirá su voluntad de que se redacte una nueva ley, ya que la LOCE "invade competencias y está impugnada tanto por el Parlamento como por el anterior gobierno de la Generalidad". La Generalidad ha decidido congelar en Cataluña la aplicación de los preceptos de la Ley de Calidad que debían entrar en vigor el próximo curso, entre ellos el incremento de las horas de enseñanza del castellano, a la espera de la reforma o derogación de esta norma.
Para justificar esta decisión, la consejera también transmitirá su voluntad de que se redacte una nueva ley subrayó en su día que la Ley de Calidad es una norma aprobada de manera "unilateral" por el PP y "contestada" por toda la comunidad educativa, y que supone "un grave retroceso en el proceso integrador del sistema educativo", además de "no respetar la pluralidad lingüística" de España e "invadir las competencias del gobierno catalán". El departamento de Enseñanza ya ha dado instrucciones para que no se publiquen los nuevos currículos previstos en la LOCE, entre ellos el que ampliaba las horas de enseñanza del castellano, lo que permitirá mantener el programa de inmersión lingüística en catalán.
La suspensión de la aplicación de los decretos de la ley supondrá también, de momento, aplazar los nuevos itinerarios para la ESO (Educación Secundaria Obligatoria), y el nuevo sistema de evaluación de los alumnos, que obligaba a repetir curso si se suspendían más de dos asignaturas. Este departamento ha paralizado, además, los cambios sobre la enseñanza de la Religión, que continuará siendo una asignatura voluntaria para los niños y de oferta obligatoria para los centros, así como los que afectaban a la elección del director de centro.