LD (Europa Press) La Confederación Española de Policía no ha tardado en desmentir la información que aseguraba que los inmigrantes que se encuentran internados en el CIE, Centro de Internamiento de Extranjeros, se habían puesto en huelga de hambre por el trato recibido y que posteriormente fueron agredidos por los policías antidisturbios que se personaron en el lugar.
De este modo, el sindicato policial mayoritario ha denunciado la inexistencia de ninguna huelga de hambre en el interior del centro así como la utilización de la inmigración por parte de grupos radicales que tienen unos fines mediáticos.
Según las denuncias de varias asociaciones vinculadas al movimiento "okupa", los inmigrantes internos en este centro situado en el barrio madrileño de Aluche-Carabanchel, reciben "un tratamiento inhumano diariamente". Por ello, según su versión, realizaron una huelga de hambre como protesta. Tras los insultos a los funcionarios, limpiadoras y el personal contratado de la cocina y la negativa de acudir a sus dormitorios, el director llamó a la Policía.
Estos colectivos denunciaron que tras la llegada de una unidad de antidisturbios, éstos "se pusieron chulos y pegaron a algunos" y en consecuencia, un joven inmigrante marroquí resultó "herido grave", con el objetivo de intimidarles.
Sin embargo, la Jefatura Superior de Policía aseguró que acudieron para contener a dos internos que "intentaron enconar y movilizar al resto". En el comunicado del CEP, subrayaron que la intervención de la UIP se realizó sin necesidad de ninguna actuación más que la conducción de los éstos a sus celdas, que además se encuentra grabado por las cámaras de seguridad interiores y exteriores.
En cuanto a las denuncias acerca del centro realizadas por estas organizaciones radicales subrayaron que el servicio de limpieza está a cargo de una empresa privada que realiza trabajos en cualquier edificio público al igual que el servicio de comidas.