Colabora

La causa de las inundaciones en la M-30 fue "una secuencia de hechos desafortunados"

Una semana después de la granizada que causó numerosos problemas en Madrid, el Ayuntamiento de Madrid ha dado su versión sobre lo ocurrido. Según el delegado del Área de Movilidad y Seguridad del Ayuntamiento de Madrid, Pedro Calvo, las inundaciones en los túneles de la M-30 se debieron a una "secuencia de hechos desafortunados" que ya han sido solventados.

L D (Europa Press) Tras la presentación de una nueva línea de autobuses en el Centro Cultural del Conde Duque, Calvo explicó que las lluvias hicieron que entrara "en carga" el estanque de tormentas de San Rufo, un colector antiguo que vierte en el canal nuevo construido en paralelo a la M-30 durante su soterramiento. Así, el agua desbordó el estanque, el agua salió a la Ribera del Manzanares y fue conducida hasta el punto donde se está construyendo una de las once nuevas pasarelas peatonales del proyecto Madrid Río por un muro que discurre entre los puentes de San Isidro y Segovia.
 
El agua se embalsó en un punto y en un momento en el que la cimentación de la nueva pasarela "aún estaba abierta, no estaba terminada, por lo que encontró un agujero por el que entrar al túnel", aseguró el edil, apuntando que si las lluvias se hubieran producido unos días después, "las obras ya habrían estado terminadas", y alegando así que la inundación fue consecuencia "de la mala fortuna", que provocó que una venida de agua "inusual en Madrid en esta época" coincidiera con las mencionadas circunstancias.
 
La siguiente coincidencia desafortunada se produjo cuando el agua, que entró "a gran velocidad en el túnel", anegó la zona eléctrica, donde están los contactos eléctricos que hacen funcionar los pozos de las bombas de achique. "Al sumergirse los cuadros eléctricos, sufrieron un cortocircuito y dejaron de funcionar, con lo que las bombas fallaron y no sacaron el agua rápido", continuó el concejal.
 
Así, fue necesario recurrir a las bombas manuales de los bomberos, de la empresa Calle 30 e incluso "a algunas contratadas ex profeso" para extraer el agua "de manera manual y rudimentaria", hasta que se pudieron liberar los cuadros eléctricos y vaciar lo que quedaba "en un par de minutos".
 
En cualquier caso, Pedro Calvo aseguró que todo fue consecuencia de "una cadena de circunstancias que es muy difícil que se repitan", por lo que será "muy difícil que se vuelva a producir". "Ese punto de la M-30 estaba preparado para venidas de agua, pero no de esa magnitud. Es difícil que un colector como San Rufo entre en carga pese a estar diseñado para acometidas importantes, que el agua salga a la ribera, y que el agua entre en el túnel, porque la obra ya está rematada. El agua no volverá a vaciar en ese punto", afirmó rotundamente.
 
Entre las medidas para lograr cumplir con ese objetivo, el delegado mencionó que "las obras de cimentación que afectaban al techo y la pared del túnel ya están terminadas" y que se va a "revisar el colector de San Rufo para que si llega una carga similar no vuelva a entrar en carga o, al menos, no saque el agua fuera".
 
Con respecto al fallo eléctrico, Calvo indicó que "ya se están elevando los cuadros", algo que según él "estaba previsto" y ya "ha sido realizado en algunos otros puntos" de la vía. Como precaución, además, se ha realizado un by-pass para que "si volviera a pasar lo mismo, un fallo en los cuadros eléctricos no fuera impedimento para mantener activas las bombas de achique".
 
Por último, Calvo se refirió a las declaraciones del ingeniero Manuel Melis, uno de los 'padres' del soterramiento de la M-30, en el diario 'El País', donde declara que la culpa de la inundación "no es de las supuestas carencias de su túnel, sino de los responsables de Madrid Río".
 
Según informa el periódico, "una serie de chapuzas en el proyecto ha dañado el mastodóntico túnel", finalizado hace dos años y medio y por el que los madrileños pagarán más de 4.800 millones de euros. Las circunstancias que llevaron a la inundación son, en opinión de Melis, culpa de las diferentes actuaciones que están teniendo lugar en la superficie, para las que no se ha realizado ningún estudio y que han llevado a que "los operarios perforaran una de las losetas de hormigón que cubren el techo de la M-30 soterrada y que destrozaron parte del hormigón protector que impermeabiliza el subterráneo".
 
"No entraré en las declaraciones de Melis, que es muy libre de decir lo que quiera. Pero creo que nadie ha visto responsabilidades (de las inundaciones) en el diseño y la ejecución de la obra de la M-30, así que no sé por qué siente la necesidad de encontrar un culpable", afirmó Calvo a este respecto. Además, rechazó que se vaya a detener o cambiar la ejecución del proyecto Madrid Río, tal y como pide el ingeniero, porque "muchos de los técnicos que están al frente (de esta iniciativa), como Manuel Arnáiz, capitanearon y protagonizaron con Melis la creación de los túneles", indicó el edil. "Tengo la máxima confianza en que las actuaciones incluidas en Madrid Río son totalmente compatibles con la infraestructura de Calle 30, no me cabe la menor duda", concluyó.
 
 

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario