Según estas informaciones, Rafael Santano, secretario y hombre de confianza del alcalde socialista de Baena, es el presunto cabecilla de una red de malversación de fondos públicos cuyo objetivo era, además de lucrarse, gastar el dinero de facturas falsas o "infladas" en un conocido club de alterne en la carretera de Puerto Banús, en Marbella, el Milady Palace.
En las conversaciones telefónicas grabadas por los responsables de la investigación se escucha a Rafael Santano pidiendo facturas falsas. Según la transcripción que ofrece El Mundo, la conversación fue la siguiente: "Me tienes que hacer dos facturas… Una de 550 euros IVA incluido… Y otra de 1.100 con el IVA incluido… Pones gastos de diversas actividades protocolarias y en la otra pones regalos celebración… Actividades Virgen de los Desamparados y me las subes mañana con las otras".
Las informaciones señalan que esta presunta red de extorsión emitía facturas por encargo y a nombre del Ayuntamiento, en la que figuraban actividades o materiales inexistentes. Primero, convencían a empresarios para que hicieran las facturas falsas, el dinero salía de las arcas del ayuntamiento, se depositaban en las empresas, que se deducían el IVA y el dinero regresaba a manos de Santano. A cambio, el Ayuntamiento seguía haciendo encargos a dichas compañías.
Pero uno de los extremos más curiosos de esta investigación es la que se adivina de la conversación anteriormente transcrita. Que los implicados ponían como excusa para obtener los fondos fraudulentos, fiestas y actividades religiosas. A través del cuñado de uno de los implicados se descubrió la factura falsa con la que, presuntamente, Santano y compañía se fueron de juerga al burdel Milady Palace en agosto de 2007.
Los citados informes de la Policía Judicial forman parte del sumario que tramita el Juzgado de primera instancia de Baena.