(Libertad Digital) El programa que Julia Otero presenta en la televisión catalana, TV3, No em ratllis (No me rayes) ha vuelto a utilizar a los niños con fines políticos. Con la excusa de que "todos los niños saben que el himno catalán se canta con la mano en el corazón" pero "en cambio, no saben bien de qué va la letra, ni acaban de entender bien" el significado, hizo a todos los niños presentes en el plató de televisión, puestos en pie, cantar el himno catalán, Els segadors, con la mano en el pecho.
Pero no sólo eso. En el programa emitido por la televisión que pagan todos los catalanes, se emitió un vídeo en el que niños de corta edad cantan Els segadors envueltos con la bandera catalana y con la hoz de la mano.
De la noticia se ha hecho e-noticies, después de que una lectora lo denunciara en La Vanguardia. En ella expone que "la última emisión del programa de Julia Otero, No em ratllis, dedicado a Catalunya, terminó con la presentadora y los niños invitados cantando Els segadors con la mano en el pecho. Me parece bien que los ciudadanos hagan uso de su libertad de expresión y manifiesten de tal modo sus sentimientos. Ahora bien, me gustaría saber qué diría Julia Otero si en un programa de niños en una cadena de ámbito estatal o, ¿por qué no?, en TV3, se acabase el programa con el presentador cantando el himno de España con la mano en el pecho".
La presentadora no duda en contestar airada en el mismo periódico:
- "No es bueno proyectar nuestras obsesiones sobre los niños. Es una lección que hemos aprendido al visitar más de doscientos colegios de Catalunya. Las criaturas son el espejo de su familia, pero sin el filtro, a veces perverso, de la corrección política. Como son y se sienten libres, dijeron, por ejemplo en el programa al que usted se refiere, que la Moreneta es negra por su origen inmigrante, confundieron a Carod-Rovira con el rey de España, no tuvieron reparos en afirmar que la senyera es poco fashion...y, sí, cantaron el himno con la mano en el pecho. Sabrá que tal cosa no es tradición catalana, sólo puede ser una imitación de las películas norteamericanas que tanto les gustan. Dejemos que los niños crezcan en paz..., habrá tiempo para que unos u otros o los de más allá les hielen el corazón, que diría Machado".
No es la primera vez que el programa de Julia Otero se tiñe de tintes políticos con los niños como protagonistas y espectadores. En octubre del año pasado invitó a Javier Sardá. En medio de un alegato en defensa de Educación para la Ciudadanía, el showman, animado por la presentadora, se dirigió a los niños presentes en el plató exclamando en dos ocasiones: "¡No votéis a Acebes!" .