L D (EFE) El escenario volverá a ser la apacible localidad californiana de Santa María, donde el 16 de enero Jackson, de 45 años, compareció ante el juez, la prensa y sus seguidores, en una primera audiencia que acabó convirtiéndose en un todo un espectáculo.
En esta ocasión la cita legal está prevista para las 8:30 hora local (17:30 en España) y la policía de la zona ha anunciado que duplicará sus efectivos, en previsión de una presencia masiva de seguidores y periodistas. La seguridad incluirá una valla de 275 metros de largo y cerca de dos metros de altura que separe a los seguidores de Jackson, y una barricada doble en las proximidades a la sala. Además, contará con cerca de un centenar de efectivos, en un despliegue policial que le costará al condado de Santa Bárbara, al que pertenece esta localidad, unos 150.000 dólares. Con esta cifra se eleva hasta 423.000 dólares el coste de las cuatro comparecencias relacionadas con el caso.
Aunque la acusación formal está sellada, se espera que en ella el jurado de investigación coincida con los nueve cargos presentados ya contra el cantante, siete de ellos de pederastia y dos por embriagar a un menor. Todos los cargos están relacionados con la misma víctima, un menor de 12 años del que no se ha difundido el nombre y que supuestamente sufrió abusos sexuales a manos del cantante entre febrero y marzo del 2003 en el rancho Neverland. El caso salió a la luz tras un documental británico centrado en las excentricidades de Jackson y donde el joven que estaba recuperándose de un cáncer salía en cámara hablando de su amigo Jackson.
En esta ocasión la policía está preparada para arrestar al que se salte los controles de seguridad y por la misma se espera que el cantante se comporte y evite escenas como la de la anterior comparecencia, cuando acabó la jornada bailando en un coche. "Eso nos haría felices, muy, muy felices", comentó a la prensa Dan Macagni, jefe de la policía que este viernes se reúne con el equipo de seguridad de Jackson. El cantante ha sustituido a los miembros de la Nación del Islam, grupo radical musulmán negro que le acompañó en su última comparecencia ante el juez, por una firma privada menos polémica. Al parecer, se trata de un consejo de su nuevo abogado, Thomas Mesereau.
El cambio de abogados constituye la otra novedad de la comparecencia después de que Jackson despidiera el pasado domingo a los anteriores, Mark Geragos y Benjamín Barfman. El resto ofrecerá menos sorpresas y los seguidores de Jackson han vuelto a realizar un llamamiento de solidaridad en apoyo al cantante (www.mjjsource.com) Bajo el eslogan de "Manten la fe", los seguidores de Jackson fletarán al menos tres autobuses para brindar transporte gratuito desde diferentes puntos de Los Angeles con destino al tribunal de Santa María. Además de los tres autobuses procedentes de Los Angeles se esperan otros procedentes del condado de Orange (California) y de Nevada.
De una audiencia total que se calcula en más de 1.500 personas, sólo 60 de ellas podrán tomar asiento dentro de la sala, acceso que se conseguirá por lotería entre los que lo soliciten esa misma madrugada. La peregrinación la completarán los miembros de la prensa, cuya presencia podía aproximarse a los 200 periodistas, además del insistente ruido de los helicópteros informativos que romperá la tranquilidad de la zona. También ha anunciado su presencia un grupo en favor de las víctimas de los abusos sexuales dispuesto a celebrar un acto de protesta.
Jackson se encuentra en libertad bajo una fianza de tres millones de dólares a la espera de juicio. De ser declarado culpable, podría ser condenado a 20 años de cárcel. La presentación de la acusación formal puede agilizar el proceso para fijar una fecha de juicio, que según el juez Rodney Melville, encargado del caso, podría ser a finales de año.