L D (EFE) Edward Málaga Trillo fue el primero en demostrar la existencia en los peces de la proteína "prión", cuya mutación origina la Encefalopatía Espongiforme Bovina, conocida como mal de las vacas locas.
Esta enfermedad, que se extendió como epidemia en 1996 en el Reino Unido, destruye progresivamente las neuronas en los mamíferos y puede ser transmitida al hombre como el mal de Creutzfeldt-Jakob (ECJ), que ataca al cerebro y conduce inexorablemente a la muerte. En una investigación que ha sido reconocida por el Premio Nobel de Química Kurt Wüthrich, entre otros importantes científicos, el biólogo peruano intenta demostrar que la proteína "prión" no produce la enfermedad en los peces y que en este elemento se puede encontrar una vacuna para la Encefalopatía Espongiforme Bovina.
"Si demostramos que la proteína de los peces no produce enfermedad, se puede utilizar esa forma, manipularla genéticamente, y suministrarla en mamíferos. Se puede emplear esa proteína para realizar una vacuna o incluso para bloquear la progresión de la enfermedad", resaltó el biólogo peruano. Descartó que la presencia de "prión" en los peces los convierta en posibles portadores del mal de las vacas locas ya que la secuencia de esta proteína es incompatible con la de los mamíferos, por lo que no puede darse el contagio.
Esta enfermedad, que se extendió como epidemia en 1996 en el Reino Unido, destruye progresivamente las neuronas en los mamíferos y puede ser transmitida al hombre como el mal de Creutzfeldt-Jakob (ECJ), que ataca al cerebro y conduce inexorablemente a la muerte. En una investigación que ha sido reconocida por el Premio Nobel de Química Kurt Wüthrich, entre otros importantes científicos, el biólogo peruano intenta demostrar que la proteína "prión" no produce la enfermedad en los peces y que en este elemento se puede encontrar una vacuna para la Encefalopatía Espongiforme Bovina.
"Si demostramos que la proteína de los peces no produce enfermedad, se puede utilizar esa forma, manipularla genéticamente, y suministrarla en mamíferos. Se puede emplear esa proteína para realizar una vacuna o incluso para bloquear la progresión de la enfermedad", resaltó el biólogo peruano. Descartó que la presencia de "prión" en los peces los convierta en posibles portadores del mal de las vacas locas ya que la secuencia de esta proteína es incompatible con la de los mamíferos, por lo que no puede darse el contagio.
Regeneración de neuronas
Durante sus investigaciones, el biólogo peruano aseguró que ha encontrado un grupo de genes en los peces destinado al crecimiento de sus neuronas, lo que les permite regenerar las células de su cerebro. A diferencia de los mamíferos, que sólo pueden regenerar sus neuronas en un 5 por ciento, el biólogo señaló que los peces tienen la capacidad de regenerar gran cantidad de células nerviosas en poco tiempo.
Explicó que es muy probable que este aporte permita el hallazgo de un tratamiento efectivo contra el Alzheimer y el Parkinson, aunque consideró que se tardará alrededor de cuatro años para que la medicina aplique este descubrimiento en terapias para combatir estas enfermedades.
Durante sus investigaciones, el biólogo peruano aseguró que ha encontrado un grupo de genes en los peces destinado al crecimiento de sus neuronas, lo que les permite regenerar las células de su cerebro. A diferencia de los mamíferos, que sólo pueden regenerar sus neuronas en un 5 por ciento, el biólogo señaló que los peces tienen la capacidad de regenerar gran cantidad de células nerviosas en poco tiempo.
Explicó que es muy probable que este aporte permita el hallazgo de un tratamiento efectivo contra el Alzheimer y el Parkinson, aunque consideró que se tardará alrededor de cuatro años para que la medicina aplique este descubrimiento en terapias para combatir estas enfermedades.