L D (EFE) Para Esteban González Pons, ambas declaraciones públicas se producen "veinticuatro horas después de que el líder de ERC, Josep Lluís Carod Rovira, lanzara su amenaza al Gobierno central exigiendo una declaración formal de que el valenciano no existe". "Se consuma la infamia del Gobierno y parece mentira que sean dos valencianos, y no sé si digo bien valencianos porque nacieron en Valencia, los que cedan a las presiones y coacciones de Carod Rovira", señaló González Pons.
A su juicio, el Gobierno que preside José Luis Rodríguez Zapatero "cumple con los requisitos exigidos por Carod Rovira de que quien realizara la declaración formal fuera como mínimo un ministro del Gobierno Zapatero y que se produjeran antes del 22 de noviembre". Rodríguez Zapatero, según el consejero, "ha sido generoso y no ha sido un ministro sino han sido dos miembros de su Gobierno, y además dos valencianos, los que hoy mismo han empezado a mostrarnos que el Gobierno puede ceder ante el chantaje de Carod Rovira, lo cual significa un ensañamiento del Gobierno central con el pueblo valenciano".
A este respecto, volvió a pedir al presidente del Gobierno "que resista y que por cuatro votos de ERC en los Presupuestos Generales del Estado no venda la dignidad del pueblo valenciano". La "exigencia" de Carod Rovira, "en cualquier ambiente del hampa, se conoce como un claro, puro y duro chantaje. Es inadmisible que dos miembros del Gobierno hayan, hoy mismo, empezado a hacer declaraciones sobre la inexistencia del valenciano". "Le pedimos al Gobierno de Zapatero que aguante -añadió-, le pedimos a los ministros valencianos del Gobierno central que ayuden a aguantar. Que los valencianos somos quien decimos lo que es el valenciano; nadie desde fuera, por un puñado de votos, tiene que decirnos qué es el valenciano".
Este sentido, Esteban González Pons recordó que lo que es el valenciano lo pone en el Estatuto de Autonomía, "y lo decimos el pueblo valenciano, pero nadie desde Madrid, presionado desde Barcelona, tiene por qué decirnos que nuestra lengua no existe. El Gobierno central debe cumplir su misión constitucional, debe ampararnos y no ceder ante el chantaje".