Pues en Asturias el tope de renta debe ser muy alto, yo conozco empresarios que solicitan beca y puedo asegurar que con bastantes ingresos.
Ah ,pero si un universitario quiere sacarse un título de monitor deportivo impartido por el propio Principado ,no tiene derecho a beca aunque no perciba ninguna para la carrera universitaria.
Esa es la respuesta que le han dado a mi hijo ,bueno ...,la primera fue que se la denegaban por haber percibido un beca ,cosa que demostramos era falsa ; la segunda que no tiene derecho a beca por no estar matriculado en curso completo (falso también) , a los funcionarios no les entra en la cabeza que no se puedan realizar unas pruebas de esquí en junio ,y así matricularse "en curso completo", las pruebas de acceso para esta modalidad son lógicamente cuando hay nieve ,y el curso teórico comienza en febrero.
En el ministerio de educación ,me dicen de palabra ,que no le dan la beca porque baja de nivel.
Para un master ,si,para un deporte no.
En la consejería de educación de Oviedo ,no tienen ya argumentos para justificar la denegación ,y de palabra también me dicen: " Es que este año no hay becas para deporte".
Yo les he dicho a ambos que porqué con la matrícula se informa del derecho a solicitar beca. Y que si mi hijo fuese un mangante ,un progre inútil,okupa o delincuente estoy segura que tendría su beca.
Me parece una medida sensata y acertada, si se lleva a la práctica bien; la gratuidad era el cachondeo padre y un gasto inútil total; pero conviene no olvidar que quien la puso en práctica -estaba previsto que de forma escalonada- fue el último gobierno del Sr. Fraga; a cada uno lo suyo.
Varias acciones importantes:
Primero prohibir los libros no reutilizables, nada de manuales para pintar como niños pequeños.
Segundo un banco de libros, establecer un medio de intercambio y compraventa de libros, hacer un libro para un alumno y un curso es totalmente antieconómico.
Obligar a los colegios a establecer una planificación lógica de los libros, nada de ir cambiando año a año para obligar a comprar nuevos libros.
Obligar a los editores a renovar los libros de forma plurianual, nada de cambiar cada año para obligar a nuevas compras, ya son bastante malos los libros como para encima ni valgan más de un año.
Ajustar el precio de los libros al coste real, cobrar 10 euros por libros de 100 páginas es una estafa promovida por la imposibilidad de ajustar la demanda a una oferta rígida y oligopólica.
Con esto se ahorrarían millones que se tiran en libros inútiles. El sector del libro no puede crecer obligando a los padres a tirar el dinero.
La gratuidad de los libros de texto no existe.
Se puede hacer que un grupo de población pague los libros de los que tienen menos recursos.
Para conseguir libros gratis, estos no deberían consumir tinta, ni papel, ni horas máquina, ni logística, ni energía, ni mano de obra.
Dejen de utilizar el lenguaje de los políticos.