
L D (Agencias) Según informó este lunes el CAC, más conocido como Comité Anti-Cope, en un comunicado. Carbonell remitió su solicitud al presidente del Parlamento de Cataluña, Ernest Benach, después de las críticas de algunos medios de comunicación a la resolución del contrato de gestión indirecta del servicio público de radiodifusión.
Desde el ámbito político, las críticas más contundentes llegaron de Ciudadanos. El PP catalán también se mostró crítico, pese a que mantiene a un representante en el CAC, legitimando este órgano creado exclusivamente para censurar a los medios críticos con el nacionalismo. Los dos partidos habían pedido la comparencia de Carbonell en el Parlamento regional. El PP catalán había registró este mismo lunes la solicitud.
Esta es la primera vez que el CAC se encarga de atribuir las frecuencias. El concurso se resolvió con la adjudicación de 83 emisoras de radio: 26 en Barcelona, 27 en Gerona, 20 en Lérida y 10 en Tarragona. En el reparto el organismo castigó especialmente a la Cadena COPE, retirándole la licencia de FM en dos capitales de provincia como Lérida y Gerona, pero también ha discriminado a otros medios poco afines con el régimen nacionalista como Unidad Editorial, editora de El Mundo, y Vocento, propietario de ABC.
Una decisión que, casualmente, coincide plenamente con las declaraciones del independentista Joan Puigcercós, solicitando un "cordón sanitario" en torno a la COPE, El Mundo y ABC.