El asunto del patrimonio de José Bono ha sido tratado a iniciativa del propio presidente, quien ha mostrado su disposición a la "máxima transparencia" en torno a su patrimonio, recogido en la declaración de bienes que figura en el Registro de Intereses del Congreso de los Diputados, y que no es público.
Bono ha relatado los pasos dados ante lo que él considera una "campaña de difamación" sobre su abultado patrimonio, los cuales han culminado con el escrito que presentó en la Fiscalía, junto a una relación detallada de sus posesiones personales y familiares y exigió a Cándido Conde Pumpido que actúe contra los medios de comunicación que han hablado de ello.
De acuerdo con la legislación electoral, el presidente del Congreso es el "custodio" de las declaraciones de bienes de los diputados, a las que ni siquiera tienen acceso los portavoces. En este caso, al ser él el afectado, el problema deriva de que no puede ser él mismo el encargado de dar fe de que todo su patrimonio figura en la declaración que le corresponde custodiar.
Bono ha abandonado a continuación la reunión para que la Mesa pudiera debatir libremente en torno al asunto, que por otra parte había llegado al órgano de gobierno de la Cámara a través de un escrito de un particular que pedía una investigación.
Con Bono ausente, se ha generado una discusión que fuentes de la Mesa han calificado de "violentísima". Las fuentes han explicado a EFE que el PP únicamente pretendía evitar que la reunión derivara en algún escrito de apoyo explícito al presidente del Congreso por el asunto de su patrimonio, algo que los "populares" creen que no corresponde en ningún caso a la Mesa del Congreso.
Los integrantes del PP en la Mesa -Ana Pastor, Jorge Fernández Díaz, Ignacio Gil Lázaro y Celia Villalobos- han dejado clara su posición al respecto y después han abandonado la reunión.
Estas fuentes han apuntado que los representantes del PP explicaron que Bono, a título individual y como diputado, podría cursar todas las acciones legales que considerara oportunas, si bien no podía en ningún caso "involucrar a la Mesa". Al no haber quorum, la reunión terminó sin que se llegara a ningún tipo de acuerdo.
No obstante, fuentes próximas al presidente del Congreso remarcan que lo que Bono pretendía era garantizar total transparencia en torno al asunto de su declaración de bienes y aseguran que el PP trataba algo que reglamentariamente no es posible, esto es, que la Comisión del Estatuto de los Diputados fuera la que confirmara que la declaración de bienes de Bono era completa.