El PP culpa al Ayuntamiento de Barcelona de que los okupas hayan sido puestos en libertad
El presidente del grupo del PPC en el ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, ha denunciado este martes la "negligencia" del equipo de gobierno por no haber aportado, a su juicio, las pruebas necesarias para acusar a los cuatro detenidos por los destrozos tras la manifestación okupa del pasado día 23. La juez dejó el lunes en libertad a los detenidos, a algunos de ellos, sin cargos.
Los manifestantes protestaban por la muerte días atrás de un okupa, Roger Albert, de 25 años, que había permanecido en coma durante cuatro meses, tras haber sido agredido por un grupo de skins durante la celebración de las fiestas de Gracia, el pasado mes de agosto. La protesta se saldó con numerosos desperfectos en el mobiliario urbano, con daños en entidades bancarias y establecimientos comerciales del centro de la ciudad y con la detención de cuatro personas, a los que el juez ha puesto en libertad, dos de ellos con cargos.
Según el líder municipal del PPC, "ya resultó indignante que, ante la gravedad de los incidentes, que se prolongaron durante más de una hora, tan sólo se practicaran cuatro detenciones", así como "vergonzosas las imágenes de la Guardia Urbana recibiendo instrucciones de encerrarse en el ayuntamiento mientras los violentos se adueñaban de la plaza Sant Jaume". Insistido en que el ayuntamiento "debe desocupar Barcelona de okupas y actuar sin complejos frente a los movimientos violentos".
Según Trias, este tipo de actitudes violentes que finalizan de este modo "crean sensación de que en esta ciudad hay impunidad", por lo que ha pedido al consistorio que reflexione sobre si pone todos los medios de prevención a su alcance y si se "sustancian suficientemente los atestados policiales" cuando se llevan ante los tribunales a los responsables de los destrozos. "No tiene lógica que la violencia acabe en nada", ha sentenciado, antes de lamentar que, debido a la falta de pruebas que inculpan a los detenidos, el juez acabe decretando su libertad.
"Si no tenemos las pruebas, mal, porque significa que no se hacen las cosas bien hechas", ha dicho, al tiempo que ha añadido que "me genera indignación que el ayuntamiento no tenga capacidad de reacción" ante este tipo de situaciones.
La juez de guardia dejó en libertad a los cuatro jóvenes detenidos, dos españoles con antecedentes y dos franceses, porque "no se acreditó su participación en los hechos". Los ocupas son dos franceses y dos españoles.
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