(Libertad Digital) Leónidas Vargas, también conocido en Colombia como el "rey de la cocaína de Caquetá", "El Viejo", "Paras de Alicate" o "José Antonio Cortés Vaquero", fue asesinado por un sicario –que estaba acompañado por otro hombre que se quedó vigilando en la puerta– poco antes de las 20 horas de este jueves con un arma dotada de un silenciador.
Según informa el diario El Tiempo, la inteligencia colombiana comenzó a rastrear llamadas entre miembros del narcotráfico tras conocer dicho asesinato. En algunas de ellas se comentaba justamente la muerte de Vargas, considerado como la mano derecha de Gonzalo Rodríguez Gacha, conocido como "El Mexicano", uno de los grandes capos del narcotráfico de los años 80 que murió en 1989 cuando intentaba huir de su rancho en Tolú. De hecho, las informaciones apuntan a que fue este hombre el que le ayudó a construir su imperio desde las regiones de Putumayo y Caquetá, dejando su trabajo de vendedor de carne. A partir de entonces, en los 90, Leónidas se convirtió en uno de los hombres más importantes y buscados. Se le señala como uno de los primeros en establecer contactos con los terroristas de las FARC para enviar droga a EEUU.
Leónidas Vargas fue capturado en 1993 en la ciudad colombiana de Cartagena y condenado a 19 años de cárcel por narcotráfico y a otros 26 por homicidio, tenencia ilegal de armas y enriquecimiento ilícito. Sin embargo, después de cumplir sólo ocho años fue puesto en libertad. En su momento, Vargas era uno de los 19 narcos más buscados de su país y por cada uno de ellos se ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares. En algunos medios se le apunta como el "puente" que permitió entrar al narcotráfico colombiano a Europa, por lo que se presume seguía teniendo contactos con algunos de los cabecillas.
Sin embargo, este jueves las autoridades colombianas señalaron que no guardaba vínculos con el narcotráfico desde que salió de prisión en 2002. El Comandante de la Policía Antinarcóticos, el general Álvaro Caro Meléndez, sostuvo que Vargas, –próximo a cumplir 60 años– era un narcotraficante confeso que ya había pagado castigo y que tras salir de la cárcel no se le volvió a conocer vínculo alguno con actividades de tráfico de drogas.
Fue detenido en Madrid en 2006 cuando intentaba viajar a Alemania para presenciar algunos partidos del Mundial de Fútbol. Estaba identificado con un pasaporte venezolano falso. España lo vincula con la llegada de un cargamento de cocaína de 500 kilos a la península a través de Valencia. Logró que la Justicia le concediera libertad bajo fianza tras serle detectado una dolencia pulmonar.