(Libertad Digital) El pasado día 12 se aprobó en el Senado, con los votos del PP, una moción en la que se instaba al Gobierno a no realizar ninguna modificación o derogación de los contenidos de la Ley Orgánica 10/2002, de 23 de diciembre, de Calidad de la Educación, ni a suspender su calendario de aplicación, sin un proceso de diálogo similar al que precedió a la aprobación de dicha ley. Este fue el primer triunfo del PP en el Senado, al conseguir que se aprobara su propuesta pese a que el presidente de la Cámara Alta obligó a repetir la votación.
El portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana preguntó este miércoles al Gobierno si va a respetar esta moción durante la sesión de control al Gobierno. “Me alegra la confirmación de cumplimiento de esta moción porque indica una variación sustancial en los anuncios de su gobierno”, dijo Zaplana, que añadió que entonces hay olvidarse de paralizar esta ley por decreto como pretende el PSOE. Zaplana dijo que paralizar esta ley va en contra de la voluntad de la mayoría de las Comunidades Autónomas, la mayoría de los padres y profesores, y derogarla por decreto y sin previo diálogo supondría “conformarse con hechos consumados”.
El portavoz popular pidió al gobierno que no se empeñe “en una contrarreforma que va en contra de las comunidades autónomas, el Senado y los padres de alumnos, niega el derecho a tener una educación pública de calidad y a los profesores el poder dar clase en un ambiente de respeto. La educación merece una reflexión profunda y ninguna prisa”.