El pasado martes, la Sociedad Protectora de Animales (SPA) había denunciado la oleada de abandono de gatos que se estaba produciendo en el país galo, ante la psicosis generada tras la muerte de un felino por gripe aviar en una isla en el norte de Alemania. Según sus datos, sólo en la jornada del sábado había recogido 40 gatos abandonados en su centro de Brignais, cerca de Lyon, en la zona donde se declaró el primer caso identificado en Francia de un ave contaminada con el H5N1, y donde luego se identificó una explotación ganadera que también resultó contaminada.
Además, en su dictamen de la semana pasada, la AFSSA dijo que no existen casos hasta el momento de ninguna persona que haya sido contaminada con la gripe aviar por un animal carnívoro, como los gatos. Por eso la Agencia señaló que "el riesgo de infección de una persona a partir de un gato puede considerarse de nulo a despreciable".