L D (EFE) López Guerra dijo que el Consejo "plantea dudas y consideraciones" al anteproyecto del Ejecutivo, pero no objeciones que señalen que el proyecto del Gobierno no es admisible.
Indicó por tanto que se mantendrán las uniones homosexuales dentro de la institución matrimonial, con la equiparación absoluta de derechos, aunque el Consejo de Estado sugiera una regulación específica y separada del matrimonio de las uniones homosexuales. "Apreciamos el trabajo del Consejo de Estado -cuyo informe no es vinculante- y tendremos en cuenta consideraciones como las relativas a la incidencia económica que pueda tener el proyecto, con la puesta en marcha de controles", dijo a Efe el secretario de Estado de Justicia.
El informe del Consejo de Estado señala que "la regulación de un nuevo modelo de convivencia en pareja entre personas del mismo sexo, que se ampara en distintos preceptos constitucionales, encuentra un sólido apoyo en diferentes resoluciones del Parlamento Europeo... si bien lo que se propugna no es directamente la apertura de la institución matrimonial a parejas del mismo sexo".
Tras señalar que "la apertura del matrimonio a parejas del mismo sexo es absolutamente minoritaria tanto en la UE como en el ámbito internacional", el informe del Consejo de Estado dictamina que la regulación "debe ser adecuada, necesaria y proporcionada en sentido estricto y no suponer una quiebra del instituto del matrimonio constitucionalmente garantizado". "La opción adoptada en el anteproyecto no es indispensable para el logro de los objetivos que éste se propone... En todo caso, suscita dudas que sea proporcionada", se añade.
Indicó por tanto que se mantendrán las uniones homosexuales dentro de la institución matrimonial, con la equiparación absoluta de derechos, aunque el Consejo de Estado sugiera una regulación específica y separada del matrimonio de las uniones homosexuales. "Apreciamos el trabajo del Consejo de Estado -cuyo informe no es vinculante- y tendremos en cuenta consideraciones como las relativas a la incidencia económica que pueda tener el proyecto, con la puesta en marcha de controles", dijo a Efe el secretario de Estado de Justicia.
El informe del Consejo de Estado señala que "la regulación de un nuevo modelo de convivencia en pareja entre personas del mismo sexo, que se ampara en distintos preceptos constitucionales, encuentra un sólido apoyo en diferentes resoluciones del Parlamento Europeo... si bien lo que se propugna no es directamente la apertura de la institución matrimonial a parejas del mismo sexo".
Tras señalar que "la apertura del matrimonio a parejas del mismo sexo es absolutamente minoritaria tanto en la UE como en el ámbito internacional", el informe del Consejo de Estado dictamina que la regulación "debe ser adecuada, necesaria y proporcionada en sentido estricto y no suponer una quiebra del instituto del matrimonio constitucionalmente garantizado". "La opción adoptada en el anteproyecto no es indispensable para el logro de los objetivos que éste se propone... En todo caso, suscita dudas que sea proporcionada", se añade.
Mejor una acción gradual que un cambio traumático
El informe defiende que las innovaciones del anteproyecto cuenten con "amplio consenso político y social" y agrega que "es preferible una acción gradual firmemente sustentada a un cambio traumático desprovisto de la necesaria seguridad y firmeza, aunque ello no suponga acoger en esta iniciativa el reconocimiento de un derecho al matrimonio de las parejas homosexuales". "Ha de reconsiderarse -considera finalmente el Consejo de Estado- la vía escogida para la consecución de unos fines que no sólo están amparados por la Constitución, sino propugnados de forma decidida desde el Parlamento Europeo y a los que se ha dado adecuada respuesta en diversos ordenamientos de nuestro entorno sin necesidad de forzar los principios articuladores del matrimonio".
Tras estudiar el texto, que este lunes llegó al ministerio de Justicia, López Guerra remarcó que no hay en él "objeciones anticonstitucionales". Al analizarlo, el secretario de Estado de Justicia dijo que si lo que busca el Gobierno es igualdad entre las uniones civiles heterosexuales y las homosexuales, "no se puede excluir del matrimonio" las segundas, porque "se mantendría la desigualdad, y queremos no sólo igualdad, sino que esta sea visible socialmente; para ello la mejor fórmula es la del matrimonio".
Un compromiso del programa socialista
Consideró este alto cargo del Ministerio de Justicia que otras vías, como plantea el Consejo de Estado, pueden dotar de estabilidad a las uniones entre parejas del mismo sexo, pero no de igualdad con las parejas heterosexuales. También estimó que incluir en el matrimonio las uniones homosexuales no afecta a la institución matrimonial tal y como está en la actualidad.
También subrayó que el anteproyecto responde a una "necesidad política y a un compromiso del programa socialista en materia de derechos civiles". En cuanto al planteamiento del Consejo de Estado de introducir esta innovación de forma gradual, López Guerra dijo que "no estamos ante una conmoción social ni un cambio traumático, porque en los últimos años la sociedad ya ha dado pasos en este sentido, y más del 60 por ciento no pone objeciones a los matrimonios homosexuales; la evolución gradual ya se ha ido produciendo".
El anteproyecto de matrimonio entre homosexuales para su remisión a las Cortes, añadió López Guerra, puede aprobarse o bien en alguno de los últimos Consejos de Ministros de este año -quedan dos- o en uno de los primeros de 2005.
Consideró este alto cargo del Ministerio de Justicia que otras vías, como plantea el Consejo de Estado, pueden dotar de estabilidad a las uniones entre parejas del mismo sexo, pero no de igualdad con las parejas heterosexuales. También estimó que incluir en el matrimonio las uniones homosexuales no afecta a la institución matrimonial tal y como está en la actualidad.
También subrayó que el anteproyecto responde a una "necesidad política y a un compromiso del programa socialista en materia de derechos civiles". En cuanto al planteamiento del Consejo de Estado de introducir esta innovación de forma gradual, López Guerra dijo que "no estamos ante una conmoción social ni un cambio traumático, porque en los últimos años la sociedad ya ha dado pasos en este sentido, y más del 60 por ciento no pone objeciones a los matrimonios homosexuales; la evolución gradual ya se ha ido produciendo".
El anteproyecto de matrimonio entre homosexuales para su remisión a las Cortes, añadió López Guerra, puede aprobarse o bien en alguno de los últimos Consejos de Ministros de este año -quedan dos- o en uno de los primeros de 2005.