El fiscal sostiene que la autorización del Ayuntamiento de Carboneras para edificar en El Algarrobico no conculcó ninguna norma, toda vez que sobre el lugar escogido para levantar el hotel no pesaba ninguna catalogación de especial protección ambiental. Respecto a la posibilidad de que se vulnerara la Ley de Costas, alude a la complejidad derivada de aplicar este punto sobre una parcela sometida a un plan parcial aprobado precisamente en el período transitorio de la aplicación de la norma.
Así, la alteración por la que el Algarrobico pasó de ser un espacio protegido a figurar como urbanizable se efectuó por la vía del hecho, lo que supone una "irregularidad administrativa" por no ser éste el medio "idóneo para salvar anomalías", según sostiene antes de concluir que, de esta acción "no puede extraerse mala fe, intencionalidad o falsedad" por parte del Gobierno andaluz.
Es más. Ya que la sentencia del juez no incluye ningún elemento novedoso que obligue a analizar el caso desde otra perspectiva, el fiscal considera que se cumple el plazo de prescripción, ya que ha transcurrido más de una de década desde que la Junta modificó los planos.
El criterio del fiscal choca con el de juez y con la asociación Salvemos Mojácar, que considera a la Junta responsable de haber aprobado el plan parcial en contra de la legalidad para incluir la construcción del hotel en un espacio protegido, por lo que, a su juicio, ha cometido un presunto delito de prevaricación.
La sentencia del juez
En el fallo judicial emitido el 5 de septiembre de 2008, el magistrado que ordenó la paralización de los trabajos de esta edificación el 21 de febrero de 2006, declaró nulos de pleno derecho los tres actos por los que el Consistorio desestimó las solicitudes de los ecologistas y, curiosamente, del Gobierno andaluz de revisión de oficio del acuerdo impugnado. El juez también acusó en la sentencia 266/08 a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Carboneras de los presuntos delitos de prevaricación administrativa y contra la ordenación del territorio.
Consecuentemente, el titular del Juzgado número 2 de lo contencioso-administrativo de Almería, Jesús Rivera, ordenó la revisión de oficio de la licencia de obras del polémico hotel que se asienta sobre el paraje carbonero de El Algarrobico al considerar que vulnera la normativa en materia de costas y medio ambiente.
Tres mapas falsificados hicieron posible su construcción
Greenpeace y la Asociación Amigos del Parque Natural de Cabo de Gata denunciaron el 7 de diciembre de 2005 que la Junta de Andalucía había utilizado «mapas falsos» de la zona para demostrar que era urbanizable y, por ende, el hotel, posible.
Los ecologistas pudieron comprobar que había diferencias entre la cartografía de ordenación del Parque Natural que les facilitó la Junta -donde El Algarrobico figuraba como zona donde se puede edificar- y la que en 1994 apareció en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (Boja) -donde está prohibida la urbanización-.¿Cuáles eran los buenos?
Dijeron en Greenpeace que los segundos, porque son los que se publicaron dentro del último Plan de Ordenación de Recursos Naturales (Porn) del Parque, que no había sufrido modificación y que en el artículo 238 incluye a El Algarrobico dentro de las zonas protegidas y, por tanto, no urbanizables. Esto confirmaría que el polémico hotel es ilegal.
Pero en la Junta sostenían que los que valen son los otros. «A mediados de los 90 se hicieron unos planos divulgativos y una edición tenía errores. Probablemente sean de los que hablan los ecologistas», aseguró a este periódico Juan José Luque, delegado de Medio Ambiente en Almería, insistiendo en que la zona es urbanizable.«No hay que basarse sólo en un artículo, sino interpretar el Porn de forma global y tener en cuenta los planos», argumenta.
Lo que está claro es que, ya sea por un error tipográfico o por interés urbanístico, había dos mapas distintos y los ecologistas, que denunciaron los hechos ante la Fiscalía de Almería, exigían el derribo del hotel. Ahora, el Fiscal dice que la alteración de los planos se hizo sin mala intención.