Rubalcaba sigue despertando el interés de cronistas y editorialistas en la prensa sabatina. El Mundo desvela la reunión que ha mantenido el todopoderoso ministro con los jueces y los nacionalistas vascos. ETA, su tregua y Otegi, rebautizado "hombre de Paz" por Eguiguren, vuelven, junto al paro de la EPA a copar portadas, como la del diario El Mundo.
Y entre tanta sesuda información, un reproche, un enfado, un cabreo. El de Cayetana Guillén Cuervo. Ataca, entre indignada y ofendida, a Libertad Digital a quien acusa de mentir. Y acusa a Libertad Digital (y a la revista Época) de reproducir una información firmada por El Confidencial Digital en relación al sueldo que hipotéticamente cobra la actriz y presentadora. En sus quejas recuerda la época en la que se le atribuía una relación sentimental con José María Aznar. También culpa a Libertad Digital de este asunto.
En cualquier caso, se muestra muy molesta por los rumores que la situaban como beneficiaria de un astronómico sueldo. Y eso que también dimos cuenta desde Libertad Digital de las declaraciones de su abogada Cristina Almeida que se apresuró a salir al paso de estas informaciones para desmentir que tuviera un sueldo tan elevado, o que su cercanía ideológica con Zapatero le hubiera permitido medrar en el ente público.
Enfados aparte, la muerte de Marcelino Camacho y el último adiós que le dieron personajes de la vida pública, gentes de izquierdas, el príncipe, Aguirre o actrices como Pilar Bardem también están en la prensa. Déjenme que destaque en El Mundo la columna de Sostres.
Atrevido y provocador como siempre titula "un hombre equivocado" para hacer una radiografía del comunismo, esa ideología con la que se identificaba Camacho. También está hoy inspirado Arcadi Espada y su "mujerío" donde ridiculiza la deriva feminista de las mujeres de la izquierda. Los morritos de Pajín, los huevos que le faltan a Moratinos según Reverte, los juegos "sexistas" de recreo y la polémica de Dragó sirven de excusa para este nuevo Correo Catalán de Arcadi.
El que debe estar triste es Suso de Toro. Se ha enterado, recuerda Federico Jiménez Losantos en sus Cuatro Esquinas, de que "su feeling" con Zapatero le perjudica.
De feeling también va la columna de Pilar Eyre en el suplemento La Otra Crónica. Concretamente del que tiene Santiago Carrillo con su majestad el Rey, y con el príncipe, al que no tiene demasiada estima. Además, el responsable de la matanza de Paracuellos presume, ni corto ni perezoso, de lucir sus 95 años "seguramente gracias a los cigarrillos que me fumo y las copas que me tomo". De todas maneras, el objetivo de sus críticas es, sobre todo, Don Juan: "El cero a la izquierda más ilustre de este país... era un tonto, un inútil que no dio un palo al agua en su vida... un juguete en manos de sus consejeros..."
En cuanto a las cifras del paro que dio la EPA, El Mundo habla de funcionarios y recuerda que en los últimos tres meses, además del efecto estacional se encuentra la contratación masiva de funcionarios públicos por parte de la administración central y los comunidades autónomas. En cambio, para El País es motivo de orgullo y satisfacción.
Tan preocupado por el Gobierno (desde que Rubalcaba asumió el poder), sale en defensa del Ejecutivo ante las críticas de los populares, que no por suaves van a ser menos sancionadas por el buque insignia de Prisa.
Tampoco deja pasar la oportunidad este fin de semana para atizarle al Tea Party, a quien sigue acusando de radical grupo de presión, "mezcla difusa de furia y frustraciones" -dice Francisco G. Basterra- que genera una "tormenta perfecta sobre Obama".
En clave de exteriores merece también la pena destacar la entrevista a Trinidad Jimenez. Llama la atención las disculpas veladas a Marruecos después del asesinato de un niño saharaui de 14 años a manos de la policía alauí.
No podía faltar en el diario de Prisa el funeral a Marcelino Camacho. La noticia, es una semblanza a cargo de Ignacio Fernández Toxo. Nostálgico, recuerda el pasado comunista de ambos y carga con dureza contra el régimen de Franco, concediendo legitimidad total a la Segunda República.
Pero El País sigue dando pomada al Gobierno. Su segundo editorial es esclarecedor: "Mejora con reparos", publica y en él augura, aunque con algo de prudencia, el inicio de la recuperación del empleo, la contratación y el descenso del paro. Y eso que entre la temporalidad y un exceso de celo contratista por parte de ayuntamientos y comunidades autónomas la EPA ha hecho el agosto, y nunca mejor dicho.
En el resto de opinión, más de lo mismo, indignación porque los asistentes al desfile de las fuerzas armadas abuchearan a Zapatero (y de esto ya ha llovido) y el conflicto de Israel y Palestina.
En cuanto a La Gaceta, lo más reseñable de la jornada de ayer fueron los abucheos que recibió Zapatero a su entrada a la capilla ardiente de Marcelino Camacho, que dicho sea de paso, será homenajeado en un gran acto en la Puerta de Alcalá.
Por lo demás, el diario de Intereconomía vuelve a atizar a José Bono, esta vez a cuenta del fiscal del Supremo, Martín Casallo, que se ha opuesto a admitir la primera querella contra el presidente del Congreso en el alto tribunal por los regalos que recibió.
En Público, hoy todo es Marcelino Camacho, no es para menos, se ha muerto "la voz de los trabajadores", el espíritu de la lucha de clases, del "hombre bueno" del "puño en alto". Como en El País, Fernández Toxo es el encargado de hacer la semblanza de Camacho.
Entre crónica y columna de nostalgia comunista, Público se permite una tira cómica en la que ridiculiza al Papa con la polémica de Sánchez Dragó. También Orejudo, de nombre Antonio, carga contra el PP y alienta la idea de que la economía puede mejorar, lo que pone nervioso a los populares que "han quitado el bozal a Rafael Hernando".
Desde luego, este diario nunca deja de sorprender. La llegada de Rubalcaba y las negociaciones con los terroristas de Batasuna-ETA, además de las insinuaciones de Blanco sobre el fin del terrorismo, tienen una interpretación muy clara para Público: el problema es que el PP utiliza a Batasuna para presionar al Gobierno. Por cierto, que como decía Sostres en su columna de El Mundo, ETA es comunista y levanta el puño, como hacía el difunto Camacho.
La Razón por su parte lleva a su portada un curioso paralelismo, que no pasa de eso, de ser curioso. Dice que "los católicos que van a misa duplican a los afiliados a los sindicatos". Aprovecha La Razón estos datos del CIS para comparar el número de católicos en España con el número de afiliados sindicales y calificar al colectivo religioso de "mayor red social de España", a pocos días de la visita de Benedicto XVI a España.
Para terminar, con ABC hablamos de gastronomía. Sobre todo de marisco. Y es que no pasó desapercibida la copiosa mariscada que se metieron entre pecho y espalda el portavoz de IU en Sevilla y el ex gerente de Mercasevilla. El diario de Vocento continúa con esta historia. Los periodistas le preguntaron ayer al susodicho ex portavoz de IU, Antonio Rodrigo, por aquella mariscada. Ni corto ni perezoso, dice que esas cosas son normales. Les aseguro que para mi quisiera dicha normalidad. Pero no queda ahí la cosa, porque Antonio Rodrigo contraataca y califica al director de ABC en Sevilla como el "jefe del clan de la mayonesa".