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El diestro Fandiño sale de la UCI pero su banderillero permanecerá un día más

El diestro Iván Fandiño y su banderillero Mario Romero, heridos ambos de carácter "grave" en la plaza de toros de Bilbao, se recuperan satisfactoriamente, mejor el primero de ellos, que ha abandonado la UCI a primera hora de la tarde, mientras que el subalterno permanecerá al menos un día más.

Fandiño descansa desde ya en una habitación de planta de la clínica de la Virgen Blanca de Bilbao, después de pasar la noche "tranquilo pero con los dolores lógicos de la cornada", pero dada la "buena evolución" de la herida, los doctores han optado con sacarle de la UCI para proseguir su recuperación, que va "por buen camino", señalaron fuentes familiares del matador.

El torero de Orduña (Vizcaya) se encuentra "más animado", tanto que desde la misma cama ya sólo piensa en volver a torear, y aunque aún no hay nada oficial, puesto que todo depende de cómo evolucione, su intención es reaparecer el próximo día 4 de septiembre en la localidad soriana de Almazán.

Fandiño resultó herido durante la faena de muleta al sexto toro, de la ganadería de Puerto de San Lorenzo, en el festejo de ayer en Bilbao.

En la enfermería fue intervenido de "herida en el tercio medio el muslo derecho de quince centímetros, con trayectoria ascendente y orificio de salida en tercio superior. Afectación de tejido subcutáneo, sección lateral de la vena safena interna en un trayecto de dos centímetros y dislaceración muscular. Pronóstico grave".

Peor parte se llevó el banderillero Mario Romero, herido con anterioridad también por el mismo toro que alcanzó a Fandiño, y que aún permanece en la UCI de la clínica de la Virgen Blanca, puesto que el percance que sufrió fue "más fuerte", pero la situación "está controlada", y si todo va según lo previsto mañana pasará a planta.

El parte de Romero es: "herida en tercio medio, cara lateral del muslo derecho, con orificio de entrada de diez centímetros y dos trayectorias. Una profunda que diseca hueso fémur y provoca varios desgarros del músculo cuádriceps. Hemorragia profusa de vasos musculares. No afectación de vasos femorales o estructuras nerviosas. Y otra descendente intermuscular que no lesiona vasos y nervios. Puntazo superficial en el glúteo derecho. Pronóstico grave".

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