El cineasta Nacho Vigalondo incendia la red: "¡El holocausto fue un montaje!"

El cineasta Nacho Vigalondo ha sido el encargado de realizar un spot publicitario para El País sobre las nuevas tecnologías y las tabletas a través de las cuales se podrá leer el diario de Prisa. Sin embargo, estos avances son los que le han metido en un jardín del que está siendo complicado salir.

Y es que Vigalondo ha incendiado internet a través de su Twitter. El viernes pasado, este director nominado a los Oscar en 2004 en la categoría de mejor cortometraje, afirmó en un tweet que "ahora que tengo más de cincuenta mil followers y me he tomado cuatro vinos podré decir mi mensaje: ¡el holocausto fue un montaje!". Este actor y director parece no haber leido el testimonio de los supervivientes de aquella barbarie

A partir de ese momento, su perfil comenzó a tener cientos de visitas y de comentarios censurando sus palabras. Sin embargo, el director español no se arrepintió de lo dicho y siguió echando leña al fuego haciendo chistes en los que combinaba el título de películas famosas con referencias al genocidio perpetrado por los nazis contra los judíos.

De este modo, algunos de estos macabros chistes publicados por Vigalondo en su Twitter eran los siguientes:

"¿Cómo se llamaba la película esa de Spielberg? Ah sí...Parque Judaíco"

"A todo gas"

"El niño del pijama de rayas se va de marcha"

"Anna Frank´s catch me if you can"

"Encuentros en la tercera fosa".

Ha sido tal la avalancha de críticas contra él que incluso el diario El País se ha planteado retirar el spot realizado para su diario. Incluso otro director como Santiago Segura o el escritor Sergi Pamiés le han dicho: "Vigalondo, no juegues con según que situaciones".

En su afán por mantener la polémica, el propio cineasta ha publicado algunos de los comentarios críticos. Algunos de ellos le decían que "no mereces el respeto de mucha gente" o "hay límites que no se cruzan".

Mientras tanto, Vigalondo intenta justificar sus comentarios antisemitas asegurando que sus bromas son un "detecta-gilipollas" y una forma de "expulsar a los followers sin sentido del humor".