L D (EFE) El cardenal y secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, durante la homilía de la misa de acción de gracias que se celebró este lunes en la basílica de San Pedro del Vaticano y en la que participaron unas 8.000 personas, entre cardenales, obispos y peregrinos venidos desde España, según informó la Conferencia Episcopal Española (CEE), recordó que estos mártires "no han sido propuestos al pueblo de Dios por su implicación política, ni por luchar contra nadie, sino por ofrecer sus vidas como testimonio de amor a Cristo".
"El mártir sabe trascender el momento histórico concreto y contemplar a sus semejantes desde el corazón de Dios", explicó, rememorando que, "en el momento de la muerte", los nuevos beatos se dirigieron "a quienes les mataban con palabras de perdón y de misericordia".
A este respecto, Bertone evocó las palabras que uno de los religiosos franciscanos de la Comunidad de Consuegra dirigió a sus hermanos justo antes de ser martirizado y en las que les animaba a " perdonar a los que os van a dar muerte". Con todo, Bertone aseguró que los nuevos beatos "han enriquecido a la Iglesia de España con su sacrificio, siendo hoy para nosotros testimonio de fe, de esperanza firme contra todo temor y de un amor hasta el extremo".
Reavivar la fe cristiana
Asimismo, manifestó su deseo de que esta beatificación "suscite en España una fuerte llamada a reavivar la fe cristiana" y se convierta en "semilla fecunda de numerosas y santas vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada", así como "una constante invitación a las familias, fundadas en el sacramento del Matrimonio, a que sean para sus hijos ejemplo y escuela del verdadero amor y 'santuario' del gran don de la vida".
Esta beatificación constituye una "apremiante invitación a vivir el Evangelio radicalmente y con sencillez, dando testimonio público y valiente de la fe", reiteró, por lo que "debemos dejar que hablen los propios mártires", que con sus vidas "nos hablarán sin duda de fe, de fortaleza, de generosa valentía y de ardiente caridad, frente a una cultura que trata de apartar o menospreciar los valores morales y humanos que nos enseña el propio Evangelio".
Testimonio de fe
Igual que ya hizo el Papa durante su saludo a los peregrinos, el cardenal Bertone insistió en que el testimonio de los mártires no ha de suscitar "un mero sentimiento de admiración", como si fueran "simples héroes o personajes de una época lejana", sino que "su palabra y sus gestos" deben impulsar a los cristianos de hoy y "en la sociedad actual" a dar "un testimonio coherente" de su fe.
"Ellos nos ayudan con su ejemplo y su intercesión para que, en la hora presente, no nos dejemos vencer por el desaliento o la confusión, evitando la inercia o el lamento estéril", concluyó.