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Educación para la Ciudadanía hará apología de los impuestos y enseñará a identificar un botellón y tribus urbanas

Los alumnos de ESO deberán aprender a identificar y aportar soluciones a problemas de los medios urbanos como "racismo, enfrentamiento por el uso de los espacios comunes, tribus urbanas y botellón". Este será uno de los criterios de evaluación de la nueva materia obligatoria Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, según uno de los anexos del borrador de Real Decreto de Enseñanzas Mínimas de Secundaria Obligatoria (ESO) remitido por el Ministerio de Educación y Ciencia a las Comunidades Autónomas. La nueva asignatura también tratará temas como el consumo responsable y el pago de impuestos para el mantenimiento de los servicios públicos.

Los alumnos de ESO deberán aprender a identificar y aportar soluciones a problemas de los medios urbanos como "racismo, enfrentamiento por el uso de los espacios comunes, tribus urbanas y botellón". Este será uno de los criterios de evaluación de la nueva materia obligatoria Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, según uno de los anexos del borrador de Real Decreto de Enseñanzas Mínimas de Secundaria Obligatoria (ESO) remitido por el Ministerio de Educación y Ciencia a las Comunidades Autónomas. La nueva asignatura también tratará temas como el consumo responsable y el pago de impuestos para el mantenimiento de los servicios públicos.
L D (EFE) Entre otros criterios de la asignatura Educación para la Ciudadanía, figuran reconocer la obligación del pago de impuestos para el mantenimiento de los servicios públicos, cuidar el entorno, la seguridad vial, la protección civil o el consumo responsable. Igualmente se mencionan la actuación de las organizaciones internacionales en caso de conflicto, de las fuerzas de pacificación, en concreto de las Fuerzas Armadas españolas en misiones internacionales, y de las ONG.
 
El borrador de Enseñanzas Mínimas recuerda que esta materia prestará especial atención a la igualdad entre hombres y mujeres. El alumno deberá ser capaz de identificar y rechazar la discriminación de personas de diferente origen, género, religión, u orientación afectivo-sexual.
 
En el apartado de contenidos se menciona la valoración crítica de los prejuicios sociales, racistas, xenófobos, sexistas y homófobos; el cuidado de las personas dependientes, ayuda a personas o grupos desfavorecidos y la familia en el marco de la Constitución. Participar en la vida del centro y del entorno y practicar el diálogo para superar los conflictos en las relaciones escolares y familiares son otras cuestiones que se tendrán en cuenta a la hora de calificar a los estudiantes.
 
Además, se mencionan los principios democráticos, la Constitución, los Estatutos de Autonomía y la elección y funcionamiento de los órganos de gobierno municipales, su control por los ciudadanos y la responsabilidad de los cargos elegidos.
 
La materia, que comenzará a estudiarse en quinto o sexto de Primaria, se impartirá en uno de los tres primeros cursos de ESO, mientras que en cuarto tomará el nombre de Educación Etico-Cívica. Su carga lectiva será de 50 y 35 horas por curso en Primaria y ESO, respectivamente.

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