L D (Agencias) Eduardo Lago relata en su primera novela, ganadora del Nadal, la historia de un periodista del New York Post que recibe la noticia de que su amigo Gal Ackerman, veinticinco años mayor que él, ha muerto. El suceso le obliga a cumplir un pacto tácito, rescatar de entre los centenares de cuadernos abandonados por el muerto en un motel de Brooklyn una novela a medio terminar. El frustrado anhelo de su autor era llegar a una sola lectora, Nadia Orlov, de quien hace años que nadie ha vuelto a saber.
Tras recibir el galardón, Lago explicó que ha estado cinco años escribiendo esta novela que llegó a convertirse "en una obsesión" y a "ocuparme todos los días". El escritor dijo que con Llámame Brooklyn ha "aprendido a escribir una novela" y admitió que es "compleja" porque quiere transmitir su "idea de la condición humana". Se trata, dijo, de una "novela de amistad y de amor".
Eduardo Lago (Madrid, 1954) vive desde hace casi veinte años en Nueva York. En 2001 recibió el II Premio Bartolomé March por su artículo de crítica literaria "El cubo de lo imposible", publicado en la Revista de Libros en enero del mismo año. Es doctor en Literatura por la Universidad de Nueva York y profesor de la Sarah Lawrence College.
La novela finalista del Nadal, dotado con 6.000 euros, fue Susana y los viejos de Marta Sanz, en la que la escritora madrileña describe un microcosmos familiar, que muta, se radicaliza y puede llegar a resquebrajarse. La autora (Madrid, 1967) definió su novela como "historia de terror realista o una historia realista de terror".