LD (EFE) Según fuentes de la investigación, un equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil se ha desplazado al lugar y ha tomado las huellas dactilares de los dos fallecidos, que podrían ser extranjeros, además de interrogar a los testigos y tratar de obtener pistas. Las huellas de los dos fallecidos están siendo introducidas en el banco dactiloscópico SAID para tratar de ser identificados y poder establecer una hipótesis sobre las causas del tiroteo, aunque no se descarta que se trate de un ajuste de cuentas entre bandas internacionales de delincuentes.
El juez de guardia de Sabadell ha ordenado el levantamiento de los dos cadáveres, mientras que la Guardia Civil ha retirado del lugar un coche, un Peugeot 205 de color azul, en el que podrían haber llegado al lugar las dos víctimas, que estaban tendidas en el suelo frente a una fábrica y en medio de un gran charco de sangre. Según ha explicado un trabajador del polígono que ha visto a las víctimas, uno de los dos fallecidos tenía tres impactos de bala a la altura de una oreja, la nuca y el tórax. El mismo testigo ha asegurado que, minutos antes del tiroteo, había visto a los dos hombres fallecidos charlando entre ellos y que nunca antes los había visto por allí.
Los investigadores de la Guardia Civil aún no han informado sobre las circunstancias y detalles en que se ha producido el doble homicidio, ni de si las víctimas iban armadas y han intentado repeler la agresión.