L D (EFE) La detención de Vitoria se produjo por casualidad. Agentes de la Policía municipal llegaron al bar a las tres menos cinco de la madrugada, por quejas de los vecinos contra el ruido que provenía del local. Los policías pidieron la documentación al dueño, el presunto agresor, tras percatarse de que estaba incumpliendo el horario de cierre, y cuando ya salían del bar, una mujer, de 26 años de edad, pidió a los agentes que la rescataran desde una ventana.
El regente del bar no tuvo más remedio que abrir la entreplanta del local, cerrada con llave, donde los agentes hallaron a la mujer, que, según la Policía, se hallaba temblando, muerta de miedo y temía por su vida. Según su relato la joven, de 26 años, llevaba encerrada desde la noche del martes y había sido obligada a mantener relaciones sexuales en dos ocasiones. Al parecer, había convivido con el detenido desde el mes de marzo, y hace seis días había decidido romper su relación con él, debido a las amenazas y agresiones que había sufrido. Cuando acudió al local para que le devolviera las llaves de su domicilio, el hombre, además de no dárselas, la obligó por la fuerza a subir a la entreplanta y la mantuvo encerrada hasta que su liberación.
La mujer fue llevada al servicio de urgencias del hospital de Santiago y al varón detenido, de 33 años, lo trasladaron a las dependencias policiales, desde donde será puesto a disposición de la autoridad judicial este jueves.
Por otra parte, en el municipio alicantino de Callosa de Segura, un hombre de 44 años y nacionalidad marroquí ha sido detenido, acusado de quemar a su novia, de 26, con un cigarrillo, después de que ésta no le diera 500 euros. El suceso se produjo este martes a las 20:00 horas en el domicilio propiedad del agresor, quien, al negarse su novia, también marroquí, a darle el dinero, sufrió zarandeos por parte del hombre y las quemaduras del cigarro, con lo que el hombre logró su propósito.
La denuncia que interpuso la víctima después de la agresión y de su huida de la casa propició la detención de su novio, como supuesto autor de un delito de malos tratos.
La denuncia que interpuso la víctima después de la agresión y de su huida de la casa propició la detención de su novio, como supuesto autor de un delito de malos tratos.