L D (EFE) Según ha informado el Ministerio de Interior, la operación "Tacos", que han llevado a cabo conjuntamente la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Agencia Tributaria, ha permitido detener a seis hombres de nacionalidad mexicana y a otros dos colombianos como presuntos miembros de la banda, que blanqueaba el dinero procedente del narcotráfico mediante sociedades ficticias. En el registro de los domicilios de los detenidos en Barcelona ciudad, se han incautado 9 millones de euros dispuestos para ser blanqueados, que se suman a los 6,5 millones de euros intervenidos a la organización en fases anteriores de la operación "Tacos".
Además, en una nave de una empresa de Rubí (Barcelona) se han incautado dos toneladas de cocaína que la banda acababa de recibir de México y que habían viajado ocultas en el interior de unas defensas de caucho como las que se usan para proteger el casco de las embarcaciones. La banda, que tenía conexiones en varios países americanos, entre ellos Estados Unidos, estaba vinculada con un cártel mexicano y su principal actividad era blanquear el dinero que éste obtenía del narcotráfico, aunque también se dedicaba a importar droga desde México.
Fuentes próximas a la investigación han explicado que la operación "Tacos" que ha permitido desarticular a la banda, se inició a raíz de una advertencia remitida por las autoridades estadounidenses sobre la entrada de grandes cantidades de cocaína en España y las actividades de blanqueo de dinero llevadas a cabo por un grupo relacionado con un cártel mexicano. La operación, dirigida por el Gabinete de Actuación Concertada sobre Tráfico de Drogas, Blanqueo de Capitales y Delitos Conexos de la Secretaría de Estado de Seguridad, se abrió hace tiempo aunque tuvo que acelerarse ayer, al tenerse constancia de que varios miembros mexicanos de la banda pensaban regresar a su país.
Por este motivo, este martes fue registrada, con la autorización del juzgado central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, una nave industrial de Rubí en la que los detenidos guardaban cerca de dos toneladas de cocaína recién llegadas de México. Además, el pasado 17 de febrero, en una fase anterior de la investigación, la policía se incautó en el aeropuerto barcelonés del Prat 5,5 millones de euros que los detenidos pretendían enviar de forma clandestina hasta el aeropuerto canadiense de Gandeer en un vuelo privado procedente de Chicago (Estados Unidos).
La policía está analizando la documentación hallada en los domicilios de los detenidos para averiguar la cantidad de dinero que pudieron haber blanqueado, y que, según fuentes próximas a la investigación, se elevaría a muchos millones de euros. Del análisis de la documentación se espera averiguar con exactitud los procedimientos a los que recurrían para "lavar" el dinero, ya que, aunque la policía sospecha que lo hacían principalmente mediante empresas ficticias, no se descarta que también compraran bienes inmuebles.
La operación "Tacos" sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones en relación con el caso y otras incautaciones de dinero en metálico, aunque fuentes próximas a la investigación han apuntado que el grueso de la banda se da por desarticulado. Los detenidos están siendo interrogados en las dependencias de la Guardia Civil y entre mañana y pasado serán puestos a disposición del juzgado de instrucción de Barcelona.
Además, en una nave de una empresa de Rubí (Barcelona) se han incautado dos toneladas de cocaína que la banda acababa de recibir de México y que habían viajado ocultas en el interior de unas defensas de caucho como las que se usan para proteger el casco de las embarcaciones. La banda, que tenía conexiones en varios países americanos, entre ellos Estados Unidos, estaba vinculada con un cártel mexicano y su principal actividad era blanquear el dinero que éste obtenía del narcotráfico, aunque también se dedicaba a importar droga desde México.
Fuentes próximas a la investigación han explicado que la operación "Tacos" que ha permitido desarticular a la banda, se inició a raíz de una advertencia remitida por las autoridades estadounidenses sobre la entrada de grandes cantidades de cocaína en España y las actividades de blanqueo de dinero llevadas a cabo por un grupo relacionado con un cártel mexicano. La operación, dirigida por el Gabinete de Actuación Concertada sobre Tráfico de Drogas, Blanqueo de Capitales y Delitos Conexos de la Secretaría de Estado de Seguridad, se abrió hace tiempo aunque tuvo que acelerarse ayer, al tenerse constancia de que varios miembros mexicanos de la banda pensaban regresar a su país.
Por este motivo, este martes fue registrada, con la autorización del juzgado central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, una nave industrial de Rubí en la que los detenidos guardaban cerca de dos toneladas de cocaína recién llegadas de México. Además, el pasado 17 de febrero, en una fase anterior de la investigación, la policía se incautó en el aeropuerto barcelonés del Prat 5,5 millones de euros que los detenidos pretendían enviar de forma clandestina hasta el aeropuerto canadiense de Gandeer en un vuelo privado procedente de Chicago (Estados Unidos).
La policía está analizando la documentación hallada en los domicilios de los detenidos para averiguar la cantidad de dinero que pudieron haber blanqueado, y que, según fuentes próximas a la investigación, se elevaría a muchos millones de euros. Del análisis de la documentación se espera averiguar con exactitud los procedimientos a los que recurrían para "lavar" el dinero, ya que, aunque la policía sospecha que lo hacían principalmente mediante empresas ficticias, no se descarta que también compraran bienes inmuebles.
La operación "Tacos" sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones en relación con el caso y otras incautaciones de dinero en metálico, aunque fuentes próximas a la investigación han apuntado que el grueso de la banda se da por desarticulado. Los detenidos están siendo interrogados en las dependencias de la Guardia Civil y entre mañana y pasado serán puestos a disposición del juzgado de instrucción de Barcelona.