L D (Europa Press) El fuego al quemar el poliuretano produjo un intenso humo que hizo necesario el desalojo de los tres bloques, de tres pisos cada uno. Pasadas las 21 horas todas las viviendas estaban ventiladas y, como no hubo ninguna afectación estructural, pudieron regresar a sus casas. No obstante, detectaron grietas en los dos pisos ubicados encima del supermercado y, si bien los técnicos aseguraron que no había peligro porque las paredes maestras no estaban afectadas, las dos familias optaron por pasar la noche fuera.
Una tercera familia de un piso en el que no se había detectado ninguna grieta también prefirió no regresar a su casa, por lo que el Ayuntamiento de Tarragona se encargó de alojar a las tres familias. Ya entrada la noche cuatro dotaciones de los Bomberos de la Generalidad continuaban remojando la zona. Necesitaron de una máquina retroexcavadora para sacar al exterior toda la basura resultante del incendio.