L D (EFE) Una llamada de auxilio de un particular llevó a la Ertzaintza hasta un domicilio de la Calle Campo de los Palacios, en el número 5, donde tras derribar la puerta de entrada, halló al ahora detenido junto a su hijo, de tres años, tendido sobre un charco de sangre y cubierto por una manta.
El padre se había autolesionado en varias partes del cuerpo, según informó la Policía vasca, y al ser sorprendido por los agentes alegó que había sido objeto de un ataque de varios individuos de nacionalidad brasileña armados con navajas. La Policía vasca no dio crédito a su testimonio y una ambulancia medicalizada le trasladó en calidad de detenido al Hospital de Txagorritxu, donde aún permanece ingresado bajo vigilancia policial.
El juez decretó secreto sumarial, por lo que la Ertzaintza no facilitó más datos a cerca de las circunstancias que rodearon la muerte del pequeño.
El padre se había autolesionado en varias partes del cuerpo, según informó la Policía vasca, y al ser sorprendido por los agentes alegó que había sido objeto de un ataque de varios individuos de nacionalidad brasileña armados con navajas. La Policía vasca no dio crédito a su testimonio y una ambulancia medicalizada le trasladó en calidad de detenido al Hospital de Txagorritxu, donde aún permanece ingresado bajo vigilancia policial.
El juez decretó secreto sumarial, por lo que la Ertzaintza no facilitó más datos a cerca de las circunstancias que rodearon la muerte del pequeño.