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Concluye el desalojo de un antiguo frontón “okupado” en Pamplona

La Policía Municipal ha concluido este martes el desalojo de los dos últimos jóvenes que, encaramados al tejado, continuaban encerrados en el antiguo frontón Euskal Jai de Pamplona. La actuación policial comenzó este lunes, día en que 40 jóvenes fueron sacados del lugar, y en que se registraron importantes desórdenes públicos en las calles del centro de la capital navarra como protesta, cuando grupos de jóvenes lanzaron piedras, botellas y cócteles molotov contra los agentes que controlaban las manifestaciones. Seis personas fueron detenidas como consecuencia de los disturbios y otras seis resultaron heridas, entre policías y ciudadanos que pasaban por la zona.

L D (EFE) El desalojo, apoyado por las Policías Foral y Nacional, comenzó sobre las 06:35 horas de este lunes, jornada en la que más de 40 jóvenes fueron sacados del lugar, pese a que muchos de ellos se encadenaron o atraparon a bloques de hormigón para entorpecer la actuación policial. Según informó el Ayuntamiento de Pamplona, el desalojo concluyó este martes a las 9.00 horas, tras bajar mediante cestas-grúa a las dos últimas personas que se encontraban en el tejado.

Un auto judicial autorizó la actuación al Ayuntamiento de Pamplona, propietario del edificio, utilizado desde hace una década como 'gaztetxe' (local juvenil), y en cuyo interior el lunes la Policía encontró numerosas dificultades para acceder, ya que la puerta principal y otras interiores, así como las ventanas se encontraban blindadas con refuerzos metálicos y de hormigón. El edificio se quiere derruir para construir en el solar un centro hidrotermal.

La actuación policial provocó la protesta de un importante grupo de jóvenes, que produjeron diversos incidentes en el Casco Viejo de Pamplona cuando se enfrentaron con miembros de la Policía Nacional. Los manifestantes  les arrojaron botellas, piedras y hasta ocho cócteles-molotov y los disturbios se mantuvieron durante la tarde-noche de este lunes de forma sostenida hasta que el orden quedó restablecido a las 00.30 horas.

Seis personas, una de ellas menor, fueron detenidas como consecuencia de estos actos violentos, y se les imputa un presunto delito de desórdenes públicos y atentado a los agentes de la autoridad. Además, según indicó este martes la Delegación del Gobierno en Navarra, en los incidentes han resultado heridos de diversa consideración, por traumatismos, cuatro integrantes del Cuerpo Nacional de Policía y, al menos, dos ciudadanos. Varios contenedores incendiados y diversos daños en vehículos policiales y en un cajero fueron otras de las consecuencias de los disturbios.

Las mismas fuentes calificaron de "especialmente tensa" la concentración 'por los espacios autogestionados' donde se registraron los hechos más graves. La manifestación estaba autorizada por la Delegación del Gobierno ya que había sido comunicada la semana pasada "en debida forma". Sin embargo, buena parte de los congregados, unos 1.200 jóvenes, protagonizaron ataques contra los agentes desplegados.

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