(LIbertad Digital/David Lozano) Las múltiples roturas de un emisario submarino han provocado una serie de importantes cantidades de vertidos de aguas fecales en la playa de la Albufereta (Alicante). Las autoridades municipales se vieron obligadas a colocar la bandera roja y la consiguiente prohibición del baño en una época en la que la afluencia de turistas es masiva. Vecinos, turistas y comerciantes de la zona anunciaron movilizaciones si no se solventaba esta penosa situación.
La pasividad de la concejala de Playas y Turismo, María José Rico (PP), ha ocasionado que los bañistas hayan cumplido sus amenazas. Pasaban unos minutos de las 13 horas cuando un millar de bañistas irrumpieron en una de las principales arterías de comunicación de Alicante, la avenida de la Costa Blanca, y cortaron el tráfico rodado de vehículos, como última llamada desesperada a las autoridades. Los manifestantes reclaman, así, una solución a la deplorable situación que atraviesa una de las más emblemáticas playas de la costa alicantina.
A la manifestación, que se ha desarrolado por espacio de una hora, se ha sumado de manera espontanea una importante cantidad de turistas. Los participantes en el corte han cerrado todos carriles de circulación, un total de 4, y, pese a ello, no se han producido incidentes destacables. Si bien, el tráfico ha resultado caótico desde esa hora en practicamente toda la ciudad.
La marcha se ha convocado bajo el lema “Salvemos la Albufereta” y durante la misma se ha pedido reiteradamente la dimisión de la responsable de Turismo y Playas, María José Rico, concejala que –por cierto- tras producirse la primera fuga de aguas fecales (la madrugada del miércoles) que ha permanecido ilocalizable durante las primeras horas de producirse la rotura del emisario colector y poco después se desplazó a Palma de Mallorca, aparentemente por motivos relacioandos con su concejalía, ciudad en la que ha permanecido hasta media tarde de hoy, según ha podido confirmar Libertad Digital.
Por último, turistas, bañistas, comerciantes y vecinos, satisfechos por la acogida de la manifestación, podrían emprender acciones más contundentes si no se solventa la situación de la playa de la Albufereta. De momento, los comerciantes de la zona ya han detectado un fuerte descenso de los ingresos en uno de los fines de semana más importantes de la temporada estival.
La catastrófica situación de la playa de la Albufereta se complementa con las denuncias que usuarios han presentado en otras playas de la ciudad como la de San Juan, El Postiguet o San Gabriel.