L D (EFE) Bush reconoció que el coste humano de esta tragedia es "incalculable" y dijo que está en contacto con las autoridades de la zona, a la que regresará este lunes, Día del Trabajo en EEUU. El presidente lanzó este mensaje a la nación tras haberse reunido con los secretarios de Defensa y Seguridad Nacional, Donald Rumsfeld y Michael Chertoff, quienes comparecieron con él.
"Completaremos la evacuación (de afectados) tan pronto y de manera tan segura como sea posible", dijo Bush, quien el viernes recorrió el área devastada por "Katrina" a comienzos de esta semana y se entrevistó con algunos de los damnificados, a los que prometió ayuda del Gobierno federal. "Nuestra nación tiene la fortaleza, los recursos y la determinación para hacer frente a este desastre", dijo Bush tras anunciar el envío de refuerzos que pertenecen a distintas armas castrenses, desde una división aerotransportada hasta el cuerpo de Marines y el Ejército de Tierra.
El mandatario dijo que en la región hay ya 4.000 soldados y que los refuerzos procederán de la 82 División Aerotransportada de Fort Bragg, en Carolina del Norte, la Primera División de Caballería de Fort Hood, en Texas, y las divisiones primera y segunda de las Fuerzas Expedicionarias de los Marines, de Camp Pendleton en California y Camp Lejeune, en Carolina del Norte.
El presidente destacó que durante su visita a los tres estados del sur de EEUU (Alabama, Luisiana y Misisipi) asolados por el huracán comprobó el gran ánimo de la gente por salir de esta situación y por ayudar y dijo que "ese espíritu no puede romperse". Bush recordó que "las peores adversidades hacen aflorar lo mejor de EEUU" y aseguró que no parará "hasta que el trabajo esté hecho", dijo el presidente, quien ha reiterado que Nueva Orleans "volverá a ser la gran ciudad que era".
"Completaremos la evacuación (de afectados) tan pronto y de manera tan segura como sea posible", dijo Bush, quien el viernes recorrió el área devastada por "Katrina" a comienzos de esta semana y se entrevistó con algunos de los damnificados, a los que prometió ayuda del Gobierno federal. "Nuestra nación tiene la fortaleza, los recursos y la determinación para hacer frente a este desastre", dijo Bush tras anunciar el envío de refuerzos que pertenecen a distintas armas castrenses, desde una división aerotransportada hasta el cuerpo de Marines y el Ejército de Tierra.
El mandatario dijo que en la región hay ya 4.000 soldados y que los refuerzos procederán de la 82 División Aerotransportada de Fort Bragg, en Carolina del Norte, la Primera División de Caballería de Fort Hood, en Texas, y las divisiones primera y segunda de las Fuerzas Expedicionarias de los Marines, de Camp Pendleton en California y Camp Lejeune, en Carolina del Norte.
El presidente destacó que durante su visita a los tres estados del sur de EEUU (Alabama, Luisiana y Misisipi) asolados por el huracán comprobó el gran ánimo de la gente por salir de esta situación y por ayudar y dijo que "ese espíritu no puede romperse". Bush recordó que "las peores adversidades hacen aflorar lo mejor de EEUU" y aseguró que no parará "hasta que el trabajo esté hecho", dijo el presidente, quien ha reiterado que Nueva Orleans "volverá a ser la gran ciudad que era".