L D (EFE) La joven de 23 años se ha entregado a la Policía después de haber sido acusada de matar presuntamente a un joven en Nápoles (sur de Italia) al disparar al aire durante la celebración de la pasada Nochevieja, informaron fuentes policiales.
La joven, que estana desaparecida desde el pasado 1 de enero cuando se emitió al orden de captura, se presentó acompañada por su abogado a la cárcel de Santa María Capua Vetere, en la localidad de Caserta.
Según algunos testigos, Manuela Terracciano disparó al aire durante los festejos del año nuevo y uno de los proyectiles alcanzó en la cabeza a Nicola Scarpa, de 24 años, mientras estaba asomado al balcón de su casa en el llamado "barrio español" de Nápoles.
Los medios de comunicación explicaron que la "poderosa" familia de la joven, que no tiene antecedentes penales, la estaba ayudando a esconderse. Su padre, Salvatore Terracciano está actualmente detenido por tráfico de drogas y extorsión y estaba considerado por los investigadores uno de los jefes de la Camorra, la mafia napolitana, del "barrio español".
Antonio Puglisi, jefe de la policía de Nápoles, había pedido el sábado, en declaraciones al canal SKY TG24 sin citar a la joven, que la persona que está acusada se entregase lo antes posible a la policía.
Nicola Scarpa, de 24 años, murió durante las celebraciones del Fin de Año, cuando fue alcanzado en la cabeza por un proyectil de arma de fuego mientras estaba asomado al balcón de su casa en el llamado "barrio español" de Nápoles.
Algunos testigos vieron que la joven de 23 años, hija del jefe Salvatore Terracciano, empuñaba un arma y disparaba al aire aquella noche, por lo que se ha emitido una orden de detención bajo la acusación de homicidio involuntario.