El partido francófono belga CDH, de orientación democristiana, quiere prohibir el uso del "burka" en los espacios públicos para luchar contra lo que ellos consideran la "deshumanización de la mujer".
El diputado George Dallemagne ha presentado un texto que durante la semana se transformará en una proposición de ley para prohibir que las mujeres puedan lleva el "burka" en lugares públicos, según ha indicado en declaraciones que publica el periódico La Derniére Heure.
El diputado ha aseverado que esta medida se toma por razones de seguridad pública, sobre todo después de que el sábado dos hombres vestidos con "burkas" atracasen una oficina de correos en las afueras de París. Dallemagne explica que con esta iniciativa se pretende sobre todo poner fin a la "deshumanización de la mujer".
También argumenta que tanto la limitación de contacto visual y de la expresión a las mujeres que llevan esta prenda está conduciendo "a una ruptura completa de la sociedad" y ha resaltado que el "burka no es requerido por el Corán o la Sunna".
El diputado ha insistido en que el número de mujeres que llevan "burka" se limita a varios centenares en el país, pero incide en que "está creciendo", a pesar de lo cual ha dejado claro que su iniciativa no regulará el uso del velo islámico ya que, a su juicio, éste "no viola la dignidad humana de las mujeres y no les impiden tener una vida social".
Esta iniciativa coincide con el debate abierto en Francia, donde una misión parlamentaria ha recomendado a las autoridades que se pronuncien contra el uso del "burka" y lo prohíban en las administraciones y en los transportes públicos.