L D (EFE) Alonso avanzó, durante un encuentro con periodistas de León, las nuevas medidas que implantará su Ministerio para velar por la seguridad de tráfico, entre las que destacó además los limitadores de velocidad en vehículos, la mejora de infraestructuras y puntos negros y la inclusión de una asignatura específica de seguridad vial desde Educación Primaria.
Sobre el "carné por puntos", destacó que "es la mejor manera para estimular un buen ejercicio de la responsabilidad de los conductores hacia la sociedad" y, por lo tanto, será "objeto de una regulación reglamentaria específica que hay que digerir y que los técnicos lo estudiarán". "El momento de rehabilitación será muy posterior, pasaran años hasta que fuera posible", dijo el ministro, que apuntó que "en todo caso, para volver a conducir se tenía que acreditar que se ha recuperado el crédito y la confianza que la sociedad debe tener en ese conductor", teniendo en cuenta que "se habla de los supuestos patológicos, los más tremendos", apostilló.
Indicó que esta medida permitirá "desarrollar una conciencia de la seguridad del tráfico vial", una "cultura progresiva que ha funcionado en otros países y puede mejorar este tema".
Por otro lado, se refirió a la "Educación vial", como una "de las asignaturas pendientes en la escuela", un asunto que ya ha estado tratando con representantes del Ministerio de Educación y que consistirá en impartir una asignatura sobre esta materia "alejada de parámetros teóricos y que será práctica".
En cuanto a los limitadores de velocidad, indicó que se exigirá el cumplimiento "riguroso" de éstos en los vehículos públicos, mientras que en los privados, aunque "no nos planteamos revisar la velocidad, sí creemos que tanto los conductores como los fabricantes podrían usarlo de forma opcional".
Sobre el "carné por puntos", destacó que "es la mejor manera para estimular un buen ejercicio de la responsabilidad de los conductores hacia la sociedad" y, por lo tanto, será "objeto de una regulación reglamentaria específica que hay que digerir y que los técnicos lo estudiarán". "El momento de rehabilitación será muy posterior, pasaran años hasta que fuera posible", dijo el ministro, que apuntó que "en todo caso, para volver a conducir se tenía que acreditar que se ha recuperado el crédito y la confianza que la sociedad debe tener en ese conductor", teniendo en cuenta que "se habla de los supuestos patológicos, los más tremendos", apostilló.
Indicó que esta medida permitirá "desarrollar una conciencia de la seguridad del tráfico vial", una "cultura progresiva que ha funcionado en otros países y puede mejorar este tema".
Por otro lado, se refirió a la "Educación vial", como una "de las asignaturas pendientes en la escuela", un asunto que ya ha estado tratando con representantes del Ministerio de Educación y que consistirá en impartir una asignatura sobre esta materia "alejada de parámetros teóricos y que será práctica".
En cuanto a los limitadores de velocidad, indicó que se exigirá el cumplimiento "riguroso" de éstos en los vehículos públicos, mientras que en los privados, aunque "no nos planteamos revisar la velocidad, sí creemos que tanto los conductores como los fabricantes podrían usarlo de forma opcional".