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Aguirre adelanta que EpC en Madrid se basará sólo en los valores de la Constitución

La presidenta  de la Comunidad de Madrid ha señalado que "la adaptación" de Educación para la Ciudadanía que se haga en esta región "consistirá única y exclusivamente en los principios y valores de la Constitución". Esperanza Aguirre ha sido clara al afirmar que "las religiones se caracterizan por las doctrinas, el que no queremos que adoctrine es el Gobierno". Así, el Defensor del Menor de esta comunidad ha explicado también que "si el Gobierno tiene la capacidad legal para fijar los contenidos de la materia, los padres tienen la capacidad de elegir la mejor educación para sus hijos". Arturo Canalda ha dejado claro que no se puede "minusvalorar el posicionamiento de aquellos que decidan objetar", ya que "tienen todo el derecho a hacerlo".

L D (Europa Press) La presidenta  de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, afirmó que "la adaptación" de la asignatura que se haga en esta región "consistirá única y exclusivamente en los principios y valores de la Constitución", si bien la materia no será impartida este curso escolar en la Comunidad de Madrid.
 
En declaraciones a Los Desayunos de TVE, Aguirre dijo tener una "postura firme" en este ámbito y opinó que "el Gobierno de la Nación no está para adoctrinar ni para decir cuáles son los valores morales que tienen que tener los niños". "Las religiones se caracterizan por las doctrinas, el que no queremos que adoctrine es el Gobierno", advirtió.
 
A su juicio, algunos de los anexos de la nueva asignatura son "escalofriantes" y esta materia debe dirigirse al "alumnado que llega de otras culturas". Por ello, la presidenta de la Comunidad de Madrid insistió en defender que se puede "objetar" a esta asignatura y que "se podría cambiar por unas tareas de voluntariado".
 
El Gobierno tiene derechos, los padres también
 
Por su parte, el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Arturo Canalda, señaló que "si bien es cierto que el Gobierno tiene la capacidad legal para fijar esa asignatura y sus contenidos mínimos, no es menos cierto que los padres tienen la capacidad de elegir la mejor educación para sus hijos".
 
Canalda afirmó que no se pueden ni "adoptar posturas maximalistas" ni "minusvalorar el posicionamiento de aquellos que decidan objetar", ya que, en su opinión, "tienen toda la capacidad y todo el derecho a hacerlo".  "Nadie discute el derecho que tiene un Gobierno a fijar unos contenidos mínimos, pero tampoco podemos perder de vista lo que genera en la sociedad esos contenidos y, si se está generando un rechazo social importante, lo que se tiene que tener en cuenta es eso, con independencia de la capacidad que se tenga para normar", aseveró.
 
En este sentido, Canalda afirmó que no recuerda ningún debate que haya puesto en cuestión ninguna asignatura hasta el punto de la objeción de conciencia. "Sí que se han discutido leyes, pero, ¿qué hayan tenido que llegar a la objeción de conciencia? Yo no lo recuerdo en la historia de la democracia", subrayó. Por ello, indicó que es "importante aunar posturas para llegar a un punto intermedio". "Lo que no se puede mantener es posturas enfrentadas de tal modo que al final lo que tengamos son niños que no tengan clase o no tengan la posibilidad de conseguir su título", se quejó.
 
Los perjudicados, los menores
 
Canalda evitó culpar a nadie directamente de la situación, que calificó de "problemática", pero indicó que "la responsabilidad, en primera instancia, es del ministerio" porque al diseñar la nueva asignatura creo unos contenidos mínimos que no eran asumibles por la generalidad de los ciudadanos, algo que, a su juicio, puede lograrse con un mayor consenso. "No hay que olvidar que existe un interés superior que es el del menor, y lo que no se debe permitir bajo ningún concepto es que con independencia de los posicionamientos de unos y otros al final los que salgan perjudicados sean los menores", afirmó.
 
Por su parte, la presidenta de la Confederación Española de Padres y Alumnos (CEAPA), Lola Abelló, defendió la Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos (EpC) y aseguró que "en una sociedad de muchas ideologías y religiones" se necesitan valores comunes.
 
Asimismo, objetó a los críticos a la nueva asignatura que "por estar en una sociedad democrática no se es demócrata, sino que hay que aprender a serlo" y afirmó que la implantación de esta nueva materia es "el gran reto" para este nuevo curso 2007-2008. Además, Abelló se mostró desconcertada por el "ruido" que ha provocado una asignatura que, a su juicio, lo único que trata de hacer es formar en "la convivencia" en un "lugar privilegiado" para ello, como es la escuela.

Para terminar, la presidenta de CEAPA subrayó que "Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos viene a completar la educación en valores morales que los padres empezamos en casa, y que se complementa en la escuela".

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