Los agentes localizaron al perro en el Mas de la Menescala y, si bien tenían montado un dispositivo de jaulas para capturarlo con vida, éste no fue efectivo. Además, ante la llegada de la noche, se descartó el uso de anestésicos por su tardanza en hacer efecto, y finalmente el animal fue abatido.
El perro, que mantenía en alerta desde hace cuatro días a vecinos y autoridades de la zona, era un macho de pelo corto color canela, de 1,55 metros de largo y 75 centímetros de alto.
La raza del cánido no está confirmada, si bien todo indica que sería un cruce de razas "potencialmente peligrosas". Además, el animal no llevaba collar ni microchip, y diferentes heridas en cuello y orejas llevaron a concluir a los agentes rurales que debía llevar asilvestrado desde hacía tiempo.