No es nuevo el debate en Tarifa entre los que promueven una actividad económica que permita subir el nivel de vida en la zona, con 40 por ciento de paro, y los que prefieren que la extensa costa tarifeña sea más bien destinada al recreo, windsurfing de tienda de campaña y ecologismo sin matices y/o, como se conoce allí, al "cachondeo", esto es, a la fácil entrada del hachís marroquí en las costas gaditanas, sobre todo las tarifeñas y aledañas.
Sobre la tercera opción hay pocas dudas, al menos en público, pero sigue sin encontrarse una postura de síntesis entre las dos primeras. El Ayuntamiento de Tarifa, gobernado ahora por el PP, defiende el proyecto urbanístico de Valdevaqueros, que consensuó con un PSOE que ahora se desmarca debido a su pacto con IU, pero una parte de la población se opone a toda construcción en estos parajes considerados "naturales" e incluso salvajes.
El Plan Parcial de Valdevaqueros, al que los ecologistas y otros grupos políticos se oponen, contiene 1.423 plazas hoteleras y 350 viviendas en 700.000 metros cuadrados del Parque Natural del Estrecho y el Parque de Los Alcornocales, espacios protegidos por normativas diversas. El Ayuntamiento argumenta que se trata de una actuación de muy baja densidad de construcción, ya que de los más de 700.000 metros cuadrados de superficie tan sólo podrá urbanizarse unos 84.000 metros.
"Nadie va a construir una urbanización a pie de playa" y, con la próxima modificación de la Ley de Costas "también será imposible". Así se ha expresado el secretario de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Medio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Federico Ramos. Y añadió que el proyecto de Valdevaqueros, "llegado su caso, se revisará" y que si no respeta las condiciones de la Ley de Costas "no se llevará a cabo. No quepa ninguna duda".
El consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Luis Planas, insistió en que el interés del Gobierno autonómico es "preservar aquello que es preservable" en el entorno de Valdevaqueros, que a su juicio "es perfectamente compatible con el desarrollo sostenible para futuras generaciones", pero en su caso afirma que proteger estas zonas es "una prioridad", sin tener en cuenta la postura de su partido en Tarifa que aprobó el proyecto.
El alcalde de Tarifa, Juan Andrés Gil, explicó a El País cuál es la situación: "Tenemos un 40% de paro en Tarifa". Además explicó que los hoteles previstos darían "600 empleos fijos, al margen de los trabajos de construcción". Frente a ecologistas e IU, ahora en el gobierno de la Junta, que se oponen al plan, Gil defiende un "turismo de calidad y sostenible". El proyecto es sostenible, según el regidor popular, porque las viviendas solo podrán tener dos plantas (el bajo y una primera) y los hoteles tres (el bajo y dos más).
Equo, Greenpeace y otras organizaciones ecologistas se oponen al proyecto. El portavoz de Equo, Juan López Uralde, propone llevar el tema al Parlamento Europeo y denunciarlo ante la Comisión Europea. Según él, hay que evitar que la economía del ladrillo, que ha llevado a España a un "hoyo" caiga sobre la playa virgen de Valdevaqueros".
Actualmente, en los alrededores de Valdevaqueros, a unos 11 kilómetros de casco urbano de Tarifa en dirección a Cádiz, hay pequeños establecimientos y un par de campings.
El ecologismo tarifeño no será el único en tomar la calle
Siempre se ha dicho que Tarifa es un paraíso entre dos mares: la mare que parió al Poniente y al mare que parió al Levante. Ahora, hay otros dos mares que cercan su paraíso. La mare que parió a quienes quieren empleo y la mare de los que prefieren recreo que desde hace años siguen sin ponerse de acuerdo. Hace años, el tema del tendido de un cable de alta tensión que cruzaba el estrecho y llegaba a Tarifa provocó importantes manifestaciones ecologistas que llegaron a ser violentas en alguna ocasión.
En este momento, el Ayuntamiento ha aprobado ya el plan parcial que prevé urbanizar la zona colindante a esta playa salvaje, "refugio para los aficionados al kite y el windsurf. El debate de fondo es entre el neopreno y el traje de baño convencional, entre dos formas diferentes de entender el ocio y el turismo", subrayaba hace poco el diario de Prisa.
Pero el ayuntamiento del PP no está dispuesto a que la calle sea sólo ocupada por los ecologistas. De hecho, este mismo lunes inspiró una concentración en apoyo al proyecto de Valdevaqueros. Según ABC bajo el lema "la verdad sobre Valdevaqueros", el Ayuntamiento de Tarifa insistió en que el desarrollo previsto "no toca la playa ni el Parque Natural del Estrecho".
El Ayuntamiento ha difundido una infografía en la que se "deja claro la zonificacón de los diferentes usos de las áreas ordenadas por Plan Parcial", de manera que entre la carretera Nacional 340 y la playa de Valdevaqueros "no se prevé desarrollo urbanístico alguno". De otra parte, afirmaron que "a ese lado de la carretera recuperamos superficie ahora privada, y obtenemos 200.000 metros cuadrados de espacio libre para uso público", asegurando que "es ahí donde se quieren reactivar acciones de regeneración del medio ambiente, contempladas en el Plan de Gestión y Usos del Parque Natural del Estrecho".
"Al otro lado de la carretera, hacia el campo, con criterios de baja intensidad y mínimo impacto", según confirmaron desde el Consistorio, es donde se proyecto llevar a cabo el desarrollo de plazas hoteleras y residenciales. Esta concentración, convocada según el Ayuntamiento "para dar a conocer estos datos a la ciudadanía", pretendía principalmente "testimoniar el apoyo al proyecto y contrarrestar así una campaña que ha redundado en datos falsos ,como la idea de que se va a urbanizar la playa de Valdevaqueros".