"Alemania empuja a España hacia el abismo del rescate Europeo", titula El Mundo. Y señala a Merkel con incontenida rabia. "La mujer que siempre dice ‘no’". Pedro J. admite que es verdad que hay algunas cosillas que hemos hecho mal, que no hemos sido buenos chicos con el déficit y algunas otras travesuras, pero jopé, "esto no quita un ápice de responsabilidad en este último episodio de la crisis a las autoridades europeas y, sobre todo, a la Alemania de Merkel" que ayer dio "un empujón en toda regla hacia el rescate financiero". También fue malo y cruel Draghi, el presidente del BCE, que no hizo "el más mínimo gesto ni dio la más pequeña señal de apoyo a España", pero vamos, aquí "quien lleva la batuta es Alemania". "Si España está cumpliendo con sus compromisos no puede ser arrojada por acción o por omisión al abismo del rescate", córcholis.
Sobre Mafo, dice el diario de Pedro J. que ayer hizo una "despedida al ataque". "Resulta de un extremado cinismo que Ordóñez culpe ahora a Rajoy y De Guindos de sus gravísimos errores" y sus declaraciones suenan a "pataleta".
El País, sin embargo, convierte a Fernández Ordóñez en una pobre víctima de la "campaña contra el Banco de España". Josep Ramoneda acusa al Gobierno de ponerse "descaradamente contra la inmensa mayoría de los ciudadanos, que pagan los impuestos con los que el banco será rescatado" mientras se resiste como un titán a dar explicaciones ni pedir responsabilidades. "Después de Bankia ¿este gobierno tendrá vergüenza para pedir más ajustes a los españoles?", se pregunta. Te apuesto a que sí. Y acaba Ramoneda: "En democracia solo debería caber una opción: denunciar a los responsables del desastre de Bankia o dimitir". Pero qué gracia tienes, Ramoneda.
El País es el único periódico que no le atiza a Bruselas y a Merkel. "Bruselas tampoco frena el vendaval", se limita a decir. Incluso disfruta. "Las justificaciones del Ejecutivo del PP se parecen mucho a las de Zapatero". La venganza siempre se come en plato frío. En el editorial, atiza a Rajoy hasta en el cielo del paladar. El problema es "la incapacidad del Gobierno para gestionar la crisis de Bankia y poner orden en el déficit autonómico", "Bruselas se ha cansado de las torpezas del gobierno español" y ha decidido "pasar a la fase de recomendaciones imperativas". De hecho, "el borrador de recomendaciones se parece a un control estricto de la economía española".
La Razón se revuelve como una pantera. "La UE desboca el riesgo", lo que hay son "ataques externos". César Vidal les pega un revés. "Hay gente empeñada en defender que lo que nos está sucediendo es fruto de una conjura internacional (...) pero una cosa es lo que alguien decide creer y predicar y otra, bien diferente, es la realidad". El problema está en las autonomías y "la única salida que tiene Rajoy es la de intervenir las autonomías más arruinadas o vendrán a hacer los reajustes".
La Gaceta también echa el broncazo a la UE por la "confusión creada en Europa sobre el rescate a Bankia" y lo mal que se están portando con nosotros. "España está haciendo los deberes y los primeros que deben creer en la UE y aparcar sus intereses domésticos son Bruselas y Berlín (...) No se entienden las reticencias del BCE a mover ficha y a apostar por unos de los socios de la UE".
ABC rezuma rencor. "Bruselas deja a España sin margen", titula el editorial. Y llora amargamente por Rajoy, que ha puesto en marcha "el más ambicioso programa de reformas de toda la era democrática". Y "en lugar de una necesaria y merecida inyección de confianza", va la malvada comisión europea y "solo ofrece a España un programa que puede dañar aun más su situación". Y para terminar de alegrarles el despertar de este día veraniego, les resumo lo que cuenta Ignacio Camacho que nos va a pasar si nos rescatan. "Lo llaman rescate, pero en realidad se trata de un secuestro; se apoderan de la soberanía de la nación afectada y le implantan un tratamiento de choque hasta que la dichosa prima se relaja". ¿A que empieza se pone interesante? "Son los hombres de negro, Men in black (...) los comisarios que Merkel manda. Una brigada sin piedad cuya presencia siembra el pánico en los gobiernos cuando las cosas se ponen como se están poniendo en España". Mola, ¿a que sí? Pues sigo. "Empiezan por las pensiones y el subsidio de desempleo, siguen por los impuestos y los salarios públicos y acaban por vender todo el patrimonio susceptible de ser comprado. Cuando terminan la misión, dejan la economía para los rastrojos y la política arrasada y se van con la prima del brazo sacudiéndose el polvo de los zapatos". ¿Se les han puesto ya los pelos de punta? Pues verán, "la consigna de Rajoy es aguantar", pero "la incógnita consiste en cuánto tiempo puede pasar así sin que los Men in black despeguen con las tijeras de podar en su siniestro equipaje". Pues no me extraña nada que a Rajoy se le hayan puesto de corbata, con perdón.