Wert: "Garantizaré que cualquier niño catalán pueda estudiar en español"

El ministro de Educación, José Ignacio Wert, está dispuesto a llevar a término una reforma en la educación, pese a las críticas que está recibiendo de la oposición y los sindicatos. En una entrevista en El Mundo, garantiza el recorte de gastos en Educación asegurando que "no se trata tanto de que el Ministerio recorte 3.000 millones como de proporcionar a las comunidades autónomas instrumentos para que cada una, en función de las necesidades que tenga de reducir el déficit, puedan optimizar su gasto educativo".

Ante la oposición de varias comunidades a las medidas anunciadas por Wert, el ministro afirma que "si alguna autonomía cree que puede bajar el déficit sin estas medidas, adelante".

Igualmente, se refiere a las críticas de distintos sectores. "Yo he recibido a todos los sindicatos menos a UGT, que no acudió al encuentro sin dar explicaciones. De todas formas, las circunstancias son las que son, y eso no va a variar en una conversación con los sindicatos", afirma de manera categórica.

Distintos sectores han criticado duramente a Wert y lo acusan de querer instaurar una universidad para ricos. Sin embargo, el ministro aclara en la entrevista que "no se modifican los umbrales económicos que dan derecho a exención de las tasas. Es decir, que las personas que con el anterior sistema no pagaban las matriculas van a seguir sin pagarlas. Introduciremos algún cambio en los umbrales de rendimiento, de tal suerte que disfrutar de una beca se vincule a una exigencia de rendimiento".

Wert habló de la inmersión lingüística en Cataluña y de la desobediencia de la Generalidad a las sentencias judiciales. En este sentido, indica que "nuestro deber es vigilar para que no se frustre el deseo de elegir la lengua vehicular de la enseñanza, sea el castellano o el catalán. Estamos en un Estado de Derecho y las resoluciones de los tribunales hay que cumplirlas. Es verdad que la ejecución de sentencias incumbe a los tribunales, pero yo garantizaré que cualquier niño catalán que quiera estudiar en español lo pueda hacer".

La posibilidad de una nueva ley educativa también fue tratada. "No la descarto", dijo. Matizó que "lo que me gustaría es que, por lo menos, el principal partido de la oposición estuviera en disposición de abordar un pacto educativo después del fracaso que tuvo el intento en la legislatura anterior".