Colabora

El mayor incremento de las tasas universitarias recaerá sobre los repetidores

El objetivo del Gobierno es que el estudiante asuma un porcentaje mayor del coste del puesto universitario.

La universidad española ya conoce cómo será su primera reforma sustancial en muchos años. La secretaria de Estado de Educación, FP y Universidades, Montserrat Gomendio, la ha presentado esta tarde, tras un encuentro con los consejeros de las comunidades autónomas del ramo.

El cambio anunciado por el equipo de José Ignacio Wert tendrá dos ejes fundamentales: por un lado, subida de las tasas, para que los universitarios paguen una cantidad más cercana al coste real de su matrícula; por el otro, cambios en la carrera docente, para que los profesores cobren en función de su ocupación diaria real. El objetivo final es la reducción de unos 3.000 millones de euros en el coste anual de la educación española.

Subida de las tasas

Matricularse en la gran mayoría de las universidades españolas costará más a partir del próximo curso. La competencia final en esta materia es de las autonomías, por lo que serán ellas las que decidan la factura total que pagará cada universitario. Pero el plan del Gobierno es que suban los costes de forma global, especialmente para los repetidores, según el siguiente esquema:

Según los cálculos del Ministerio, el incremento máximo en la primera matrícula, en el caso de que la comunidad autónoma de turno eleve el coste hasta el 25%, sería de unos 60 euros al mes o unos 540 euros por alumno y curso. En la actualidad, los universitarios sólo asumen una media del 15% del coste real de las titulaciones de grado (entre 5.000 y 7.000 euros por año).

Según ha indicado Gomendio, ante la crudeza de la crisis económica "a los estudiantes les exigimos un mínimo de rendimiento y si no es así tendrán que cubrir el coste adicional de siguientes matriculas". Por otro lado, los costes de los másteres "no habilitantes" (no necesarios para ejercer ciertas profesiones) se incrementarán hasta un 50%.

Carreras y profesores

La segunda parte de lo presentado este jueves tiene que ver con las carreras ofrecidas (hay titulaciones con 8-10 alumnos en algunas universidades) y con la carrera docente de los profesores. En este sentido, cada comunidad estudiará con las universidades de su territorio "estándares mínimos de eficiencia" de las titulaciones para garantizar la eficiencia y viabilidad del sistema.

Por otro lado, el Gobierno ha planteado a las comunidades autónomas cambiar la carga docente del personal universitario en función de los sexenios vivos que tengan en relación con la investigación. En este sentido, ha señalado que se reducirá la carga docente de aquellos que tengan sexenios vivos -que acrediten investigaciones en los seis últimos años– y se aumentará aquella carga docente de los profesores que no los tengan. Actualmente, según ha explicado, hay un 50% de funcionarios profesores universitarios que no tienen sexenios vivos.

La diferencia será, según la secretaria general de Política Universitaria, Montserrat Gomendio, los profesores que no tienen un sexenio vivo ampliarán la docencia hasta un máximo de 32 créditos y un investigador impartirá 16. "Buscamos una especialización en el reparto de recursos. Es simplemente dar mayor flexibilidad a la hora de asignar las cargas a los profesores", ha aclarado.

En todo caso, la secretaria de Estado ha explicado que cada una de las medidas será decidida por las comunidades autónomas, que tomarán las decisiones y el tipo de acciones que quieren implementar dentro del abanico de posibilidades. "Decidirán, no sólo las medidas que necesita implementar la comunidad, según las necesidades de las universidades, sino también el grado de intensidad", ha apostillado.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario