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Anson sale en defensa de Ussía: "Todo lo que dices de Mingote es la pura verdad"

El último periodista en entrar en la polémica por la carta de Mingote publicada por Ussía ha sido Luis María Anson. Dice que todo es verdad.

concon dijo el día 9 de Abril de 2012 a las 11:34:

Por cierto, termino mi disertación sobre la falta de respeto:

Después de terminar las Misas, a las que solían acudir muchos más hombres que mujeres, dichos varones salían al pórtico de la Iglesia y platicaban sus temas siempre en vascuence.

Pero curiosamente intercalaban, a veces con frecuencia inusitada, una serie de tacos y no pocas blasfemias.

Todo ello en español.

Argüían ellos que el vascuence carecía prácticamente de tacos y palabrotas. Y que si las soltaban era única y exclusivamente por su magnífica resonancia y no por faltar al respeto a nadie

concon dijo el día 9 de Abril de 2012 a las 11:15:

quecosas

Efectivamente.

Hay que dar su importancia a "la falta de respeto".

Hace ya muchos años, en Zarauz donde yo viví varios años, los curas vascos solían predicar sus sermones de la Misa dominical tanto en español como en vascuence y dado que para muchos vascos (y vascas, no olvidemos la cuota) todavía seguía siendo su única comunicación verbal este dialecto.

El párroco de Zarauz, en uno de sus sermones, trató de la importancia del pecado en sus diversas facetas.
Sobre todo el pecado mortal.

Como ejemplo, sacó a colación el parricidio.

Decía: "El parricida comete dos pecados. Ambos mortales.
Uno por matar a su padre.
Y otro...otro...¡por faltarle al respeto!"





Ikara01 dijo el día 9 de Abril de 2012 a las 09:58:

Lamentable espectáculo. Aunque un Grande no deja de serlo porque en torno a él pululen los enanos. Deo gratia.

quecosas dijo el día 9 de Abril de 2012 a las 01:54:

¿No les parece lamentable, y una auténtica falta de respeto, que Mingote no lleve ni una semana muerto, y sigan estos señores alimentando esta innecesaria e inútil polémica?.

concon dijo el día 9 de Abril de 2012 a las 00:11:

Por cierto, insisto en un tema:

En todas las reseñas habidas en los medios de comunicación sobre la andadura de Mingote en ABC aparece la antigua anécdota sobre la querella que le interpusieron los "ultramarineros" (pedían 4 años y seis meses y un millón de pesetas de multa) y que se saldó con el desdicho de Mingote y el regalo del jamón.

No aparece sin embargo otra querella mucho más interesante (criminal, además) interpuesta por una politiquilla actual que entonces militaba en el PSOE como consejera del gobierno vasco.

La tal ha ha cambiado ahora de chaqueta.

Para los que no recuerden o ignoren, voy a repetir un comentario de hace un par de días que envié a LD (y que tampoco me censuraron) :

"Decía Ussía hace una docena de años:
"Hay en la vida política de Rosa Díez que por mucho que lo he intentado no he logrado perdonar. Siendo consejera de Turismo del Gobierno vasco se empecinó en meter en la cárcel a Antonio Mingote por un dibujo magistral publicado en ABC. Querella criminal. Mingote a la cárcel. No lo consiguió. Más espina que Rosa." "

Al igual que Alfonso Ussía, yo tampoco he logrado perdonar

concon dijo el día 8 de Abril de 2012 a las 21:43:

Hace un par de días envié a LD (y menos mal que esta vez no me lo censuraron) las tres crónicas que el Confidencial digital publicó sobre este asunto.

Y no son dos años los que Anson dice que Ussía retuvo la carta.

La 1ª crónica es del 5 Enero 2009 ("Mingote abandona el ABC para fichar por La Razón"):

http://www.elconfidencial.com/cache/2009/01/05/elc...

La 2ª en el 22 de Enero 2009. ECD
("Las cuatro condiciones planteadas por Antonio Mingote para asegurar su permanencia en ABC, que aún no está firmada"):

http://elconfidencialdigital.com/medios/044567/las...

La 3ª en el 10 de Marzo 2009
(ECD: "ABC blinda a Mingote: El dibujante, que pidió un fondo de pensiones para su mujer, continuará en ABC de por vida tras renovar su contrato").

Es evidente que lo que dice su esposa Isabel, en entrevista de 6.4.2012, sea verdad:

"Las respuestas de la viuda dibujan a un maestro absolutamente despreocupado por las cuestiones materiales, con detalles que rozan lo increíble como que allá por 1966 guardaba 50.000 pesetas en un cajón de casa de las que ni tan siquiera se acordaba. “Y así siguió toda su vida, sin saber lo que valía el dinero”.

Y digo yo:

Hasta que supo que su mujer quedaba en la penuria más o menos.