Decenas de miles de cofrades se preparan para el comienzo de la Semana Santa y miles de procesiones recorrerán las calles españolas durante estos días. Muchos miran al cielo por si la lluvia decide aparecer en su gran semana. La crisis es también protagonista y en algunas ciudades los actos corren peligro por la delicada situación económica de muchos ayuntamientos.
Además, serán muchas las ciudades que verán desfilar sin problemas a militares custodiando los pasos volviendo a la normalidad que se produjo hasta la polémica con la ministra socialista Carmen Chacón. La Armada española estará presente en las procesiones de Semana Santa que se desarrollan en las comunidades autónomas de Galicia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía, Murcia y Canarias.
903 voluntarios pertenecientes a 21 unidades de la Armada participan a lo largo de la semana en diversos actos programados, mientras que jefes de unidad acudirán como representantes institucionales.
La Semana Santa andaluza comienza mañana con un Domingo de Ramos marcado por el riesgo de lluvia, que amenaza la salida de procesiones, y por la crisis económica, que ha dejado a La Línea (Cádiz) sin servicio policial y a toda la comunidad con una ocupación hotelera media del 61 por ciento.
Las hermandades de La Línea de la Concepción (Cádiz) decidirán, de forma individual, si salen en procesión durante la Semana Santa, ante la falta de policías para garantizar la seguridad en las calles dadas las numerosas bajas médicas producidas, que el Ayuntamiento atribuye a una protesta por las siete nóminas que les adeuda. Esta es la decisión que ha tomado hoy el Consejo de Hermandades, rectificando su acuerdo de anoche de no realizar las estaciones de penitencia y sustituirlas por actos de culto interno en cada una de las parroquias.
La Junta de Andalucía prevé que la media de ocupación hotelera, que ahora se cifra en un 53 por ciento, alcance en los últimos días de Semana Santa el 61,4 por ciento, una previsión moderada, sujeta al riesgo de lluvia y muy por debajo del 75 por ciento del año anterior.
Las Turbas conquenses, las tamboradas albaceteñas, el silencio procesional de Toledo y los pasos de Ciudad Real serán, a partir de este Domingo de Ramos, los protagonistas de la tradicional y turísticamente reconocida Semana Santa castellano-manchega.
Así, la Semana Santa de Cuenca cuenta con el reconocimiento de fiesta de Interés Turístico Internacional. Y es que cada año miles de personas acuden a esta ciudad para vivir en primera persona las tradicionales procesiones entre las que destaca la del Camino del Calvario, más conocida como las Turbas, según datos recogidos de la web oficial de Turismo de Castilla-La Mancha.