La Policía Científica ha encontrado en Madrid los restos de un cadáver descuartizado por los integrantes del clan mafioso Zemum, herederos del grupo paramilitar Los Tigres de Arkán, acusados de matar en 2003 al primer ministro serbio, Zoran Djindjic.
El cadáver era el de Milan Jurisic, un miembro de su grupo al que no sólo asesinaron para ajustarle las cuentas: también lo desollaron y se lo comieron.
Según confesó el líder del grupo, Luka Bojovic –detenido el pasado 9 de febrero junto a otros tres miembros de su banda en un restaurante de Valencia-, a Jurisic lo mataron a martillazos, lo descuartizaron y separaron la carne de los huesos. Una parte de ésta se la comieron y el resto la tiraron por un váter. Según informa Levante-emv, decidieron deshacerse de los huesos con una máquina trituradora, y cuando ésta se rompió, decidieron tirar los restos por el río Manzanares.
Las primeras investigaciones, desarrolladas por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central, apuntan a que la víctima podría llevar varios años muerta –algunos sitúan su asesinato en 2009-.
La orden de la búsqueda del cadáver partió del titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu. Este juzgado ordenó la búsqueda un mes después de que fueran detenidos los cuatro integrantes del Zemum en un restaurante de Valencia –entre los que estaba el supuesto autor del magnicidio de Djindjic, Vladimir Milisavljevic-.